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No se vio por TV: la reacción de Marcelo Gallardo tras el gol agónico de Racing que eliminó a River

River cayó 3-2 en Avellaneda con un cierre doloroso y quedó afuera del Clausura. Gallardo terminó incrédulo tras el error que dejó a su equipo sin cuartos.


River terminó su 2025 futbolístico del peor modo. No fue solo cuestión de resultados: tampoco logró sostener un funcionamiento convincente y los hinchas lo sintieron en cada tramo del año. Marcelo Gallardo cargó con la mayor parte de la responsabilidad, pero también hubo rendimientos individuales por debajo de lo esperado. Entre ellos, el de Matías Galarza Fonda, quien llegó en el último mercado y terminó envuelto en la jugada clave de la eliminación ante Racing.

El duelo empezó torcido para el Millonario. A los tres minutos, Santiago Solari apareció de cabeza para adelantar a la Academia. Recién en el segundo tiempo, con los ingresos de Juan Fernando Quintero e Ian Subiabre, River mostró otra cara. En una ráfaga, Subiabre empató y Juanfer lo dio vuelta con un zurdazo preciso que sacudió un encuentro trabado y muy físico.

La alegría no duró demasiado. A los 28, un remate de Adrián “Toto” Fernández se desvió en Lucas Martínez Quarta y terminó en el 2-2. Y ahí, cuando todo olía a alargue, llegó el golpe más duro: en el cierre, una acción desprolija en el área terminó con Gastón Martirena empujando la pelota ante un mal cierre de Galarza Fonda. Racing se quedó con el 3-2 y avanzó a cuartos, mientras River cerraba un año espantoso.

La reacción de Marcelo Gallardo al 3-2 de Racing que no mostró la TV

La reacción de Gallardo al agónico gol de Martirena

La reacción de Gallardo al agónico gol de Martirena.

La reacción de Gallardo también se convirtió en noticia. El DT venía intenso desde el inicio: marcando, señalando, corrigiendo y mostrando fastidio con quienes no mantenían la intensidad. Pero en el tercer gol, su gesto lo dijo todo. Quedó quieto, casi congelado, mirando la jugada sin poder creerla. Luego, negó lentamente con la cabeza, un gesto que reflejó la frustración de una temporada que nunca terminó de arrancar.

River ahora deberá resetear y reconstruir su 2026 después de un año realmente para el olvido: sin títulos y con un cierre que expuso muchas dudas y prácticamente ninguna certeza.