Miguel Ángel Russo, el técnico que llevó a Boca a su última gloria en la Copa Libertadores
El entrenador falleció a los 69 años. Condujo al “Xeneize” hacia su sexta Copa Libertadores, en una campaña que quedó grabada en la historia del club.

Miguel Ángel Russo fue el entrenador que llevó a Boca al título de la Copa Libertadores 2007, la última conquista continental del club.
NAMiguel Ángel Russo, quien falleció este miércoles a los 69 años, será recordado para siempre como el técnico que condujo a Boca Juniors a su última conquista de la Copa Libertadores. En 2007, bajo su dirección, el “Xeneize” venció a Gremio de Brasil con un imponente resultado global de 5-0, coronando una campaña inolvidable.
El entrenador murió en su casa, acompañado por su familia, tras haber atravesado complicaciones de salud que derivaron en una internación domiciliaria. Russo había sido hospitalizado el 2 de septiembre debido a una infección urinaria y, pese a su recuperación parcial, su cuadro se agravó en las últimas semanas.
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Su legado deportivo en Boca comenzó a escribirse a fines de 2006, cuando asumió la dirección técnica tras la salida de Ricardo La Volpe. Venía de un exitoso ciclo en Vélez Sarsfield, donde se consagró campeón del Torneo Clausura 2005. Con 50 años y una sólida reputación como formador y estratega, Russo asumió el desafío de devolverle a Boca la gloria continental.
Una campaña histórica rumbo a la Copa Libertadores 2007
La Copa Libertadores de 2007 comenzó apenas dos meses después de su llegada. Boca integró el Grupo 7 junto a Toluca de México, Cienciano de Perú y Bolívar de Bolivia. El debut fue en la altura de La Paz, donde el equipo empató 0-0 ante Bolívar. En su presentación en la Bombonera, derrotó 1-0 a Cienciano con gol de Hugo Ibarra.
El “Xeneize” sufrió un traspié ante Toluca en México, cayendo 2-0, pero se recuperó con una victoria por 3-0 en Buenos Aires gracias a un doblete de Juan Román Riquelme y un tanto de Jonathan Maidana. Pese a una nueva derrota ante Cienciano, Boca selló su clasificación con un contundente 7-0 a Bolívar, con goles de Rodrigo Palacio, Bruno Marioni, Martín Palermo, Jesús Dátolo y un autogol de Carlos Tordoya.
De la épica ante Vélez a la final soñada
En octavos de final, el conjunto dirigido por Russo se midió con Vélez Sarsfield. Ganó 3-0 en la ida con goles de Riquelme, Palermo y Clemente Rodríguez, y en la vuelta, pese a perder 3-1, un gol olímpico de Riquelme aseguró el pase. En cuartos, Boca eliminó a Libertad de Paraguay con un global de 3-1 gracias a tantos de Palermo, Palacio y Riquelme.
Las semifinales ante Cúcuta Deportivo dejaron una de las noches más recordadas de la Bombonera. Tras caer 3-1 en Colombia, Boca remontó con una victoria 3-0 bajo una intensa niebla, con goles de Riquelme, Palermo y Battaglia, sellando el pase a la final.
La consagración en Porto Alegre
En la final, Boca goleó 3-0 a Gremio en la Bombonera con tantos de Palacio, Riquelme y un gol en contra del brasileño Patricio. En la revancha, en Porto Alegre, el equipo argentino volvió a imponerse por 2-0 con otro doblete de Juan Román Riquelme, figura indiscutida y máximo goleador del torneo con ocho tantos.
Con ese triunfo, Miguel Ángel Russo llevó a Boca a conquistar su sexta Copa Libertadores, la última hasta hoy, y se consagró como uno de los entrenadores más importantes de la historia del club. Su legado, basado en el trabajo, la serenidad y la confianza en sus jugadores, perdura como símbolo de una época dorada.
“Deja una huella imborrable en nuestra institución”, expresó Boca Juniors en su comunicado oficial. Palabras que resumen el sentimiento de toda una hinchada hacia un técnico que supo transformar la historia en gloria eterna.