Aseguran que fue Flavio Briatore quien pidió dar la orden a Franco Colapinto: el impensado motivo
Fuentes británicas sostienen que la polémica orden “Hold positions” en Austin no fue un error, sino una estrategia pensada por Flavio Briatore.
La maniobra de Colapinto ante Gasly en Austin volvió a poner a Briatore en el centro de la escena.
ww.francolapinto.comEn la Fórmula 1 las historias no terminan cuando baja la bandera a cuadros. Detrás de la polémica orden de “Hold positions, please” que recibió Franco Colapinto en Austin, surgió una teoría que vuelve a poner a Flavio Briatore bajo los reflectores.
Medios británicos aseguran que la instrucción habría sido una prueba deliberada, ideada por el histórico dirigente italiano para medir el temple del piloto argentino. Según esas versiones, el actual asesor deportivo de Alpine habría sido quien impulsó la orden para que Colapinto mantuviera su posición detrás de Pierre Gasly en las últimas vueltas del Gran Premio de Estados Unidos. El objetivo, aseguran, era “ver cómo reaccionaba” ante la tensión de equipo y la presión jerárquica.
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El gesto que alimenta los rumores
Cuando Colapinto desobedeció y ejecutó una maniobra impecable para adelantar a su compañero, nada pareció fuera de lo normal en el muro de Alpine. Pero, según testigos citados por la prensa inglesa, Briatore habría sonreído. No en señal de molestia, sino de satisfacción.
En Enstone no confirman ni desmienten la versión, aunque muchos dentro del paddock consideran que la historia encaja perfectamente con la manera de actuar del italiano. A lo largo de su carrera, Briatore fue conocido por someter a sus pilotos a situaciones límite para evaluar su carácter. Lo hizo con Michael Schumacher en Benetton y con Fernando Alonso en Renault, en ambos casos antes de sus grandes consagraciones.
Franco Colapinto, ¿aprobado?
Si la teoría británica se confirmara, la historia en Austin dejaría de ser una simple polémica para transformarse en un test de personalidad que Colapinto habría superado con nota. Su decisión de adelantar a Gasly —aun con una orden explícita en contra— habría mostrado exactamente lo que Briatore buscaba: instinto, ambición y carácter.
En un equipo que atraviesa una etapa de reconstrucción, esos rasgos podrían valer más que un punto en la clasificación. Para algunos analistas, esa maniobra podría incluso haber marcado un antes y un después en la percepción de Alpine sobre el piloto argentino.
Por ahora, todo sigue en el terreno de los rumores. Pero si la sonrisa de Briatore existió, fue quizás la señal más clara de que Colapinto pasó una prueba que podría servirle de cara al futuro.