“Pronóstico reservado”: preocupación por la salud de un campeón del mundo en 1978

Hace poco más de un mes, cuando Talleres de Córdoba conquistaba el primer título local de su historia al vencer a River por penales en la Supercopa Internacional, la familia de Luis Galván, campeón del mundo con la Selección argentina en 1978, hizo saber que el ídolo de la T había sido internado por un problema renal y que por eso no había podido viajar a Asunción ni ser parte de lo festejos.

“El pueblo Albiazul se une para desear una pronta recuperación a nuestro campeón del mundo Luis Galván. ¡Le enviamos fuerzas a nuestro ídolo y a toda su familia!”, lo saludó enseguida el club en el que jugó entre 1970 y 1982 y luego entre 1986 y 1987, antes de retirarse.

Lo cierto es que pasaron varias semanas y Galván, de 77 años, campeón del mundo en 1978 con el honor de haber disputado todos los minutos del certamen y parte una defensa junto a leyendas como Alberto Tarantini, Daniel Passarella y Jorge Olguín, continúa internado en una sala común de la clínica Reina Fabiola de Córdoba por una neumonía bilateral.

Según información de La Voz del Interior, un familiar directo del ex lateral derecho nacido en Santiago del Estero reveló que Galván, ya internado en el hospital, se contagió de un virus que derivó en una neumonía. “Los médicos actuaron de inmediato aplicando antibióticos de amplio espectro, más la ayuda de un respirador para facilitar su oxigenación”, habría expresado el allegado.

“Aún sigue internado y su pronóstico es reservado, pero hay mejoría. Luis jamás estuvo inconsciente. Su ánimo y ganas de salir de este momento están intactos”, agregó. Talleres de Córdoba y todo el fútbol argentino vela por la pronta recuperación de uno de los campeones del 78.