La honestidad brutal de Costas en Racing sobre el clásico ante Independiente: "Cuando era hincha, me tuve que comer..."

Racing no tuvo un mal partido. Buscó por todos los medios abrir el marcador ante un durísimo Godoy Cruz, que pegó en el momento justo, cuando la pasaba mal, y luego logró ampliar la ventaja ay controlar el partido. La derrota le impidió alcanzar a su rival de turno en la cima de la tabla pero no lo relega lo suficiente para pelear el campeonato.
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Al menos, ese campeonato. Porque el próximo sábado tendrá que disputar el otro, el que para el entrenador Gustavo Costas es igual de importante. Se trata del clásico ante Independiente, que se llevará a cabo en el estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini.
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"Viene el clásico, con el rival que le querés ganar siempre. Los clásicos son un campeonato aparte. Eso te diría. Hay que levantar la cabeza, levantarnos. Que nos golpeó, nos golpeó, pero hay que sentirlo, porque si a vos te da lo mismo ganar o perder eso se hace más difícil. Tenemos que levantarnos rápido porque viene un partido muy importante para Racing, para la gente. Sigo confiando a muerte", comenzó adelantando, al hablar de la derrota ante el Tomba.
Luego, ya metido en el rival, expresó que le diría al hincha de Racing en la previa al partido ante Independiente. "Lo que les puedo decir es que vamos a dejar todo. Yo primero y principal, ustedes saben lo que yo siento por estos colores, lo que más quiero es ganar en esa cancha. Los hinchas saben lo que yo siento, lo mismo que sienten ellos y capaz que más".
Finalmente, para ilustrar cómo vivía el clásico, Costas reconoció que una de sus motivaciones para ganar el clásico es lo que le tocó vivir como hincha. "Nací acá y cuando era hincha me tuve que comer épocas muy malas con ellos allá arriba. Así que el hincha sabe lo que siento yo en los clásicos. Por eso dije que para mí es un campeonato aparte", reconoció.
La particularidad es que lejos de enfocarse en el presente, uno de las causas que motivan a Costas para ganarle a su clásico rival es la época dorada de Independiente, con los títulos internacionales de por medio. En cualquier caso, para motivarse cualquier excusa es buena.