Los Pumas debutaron con una actuación decepcionante
El conjunto argentino dejó una pálida imagen en Marsella y cayó por 27-10 ante una Rosa que jugó con un hombre menos durante más de 70 minutos.
Llegaron a Francia con una ilusión muy grande y nadie esperaba una derrota como la que se dio en la calurosa noche de Marsella. Con un jugador de menos desde el arranque por la expulsión de Tom Curry y una actuación sobresaliente de sus forwards, Inglaterra ganó gracias a la inteligencia de su planteo: cerró cada uno de los caminos hacia su in-goal y con una notable defensa y un conductor magistral, George Ford, le gano la pulseada a Los Pumas. Y además, al planteo de su entrenador, para que el equipo inglés recupere la confianza que no tenía cuando llegó al Mundial de Rugby 2023.
Ford anotó los 27 tantos de su equipo para ganar en el debut. Pensar que hasta hace muy poco estuvo en duda su continuidad en el seleccionado de la Rosa. El anterior Head Coach, Eddie Jones, casi no lo tenía en cuenta. El diez resurgió de las cenizas y se despachó con una actuación fenomenal.
¿Qué se puede decir de Los Pumas? Que no les salió nada. Desconectados, sin poder de resolución ni rebeldía, al equipo se lo vio inconexo en todas sus líneas, sin ganar ninguno de los duelos individuales y menos, los colectivos.
Y a ese esquema inglés de jugar con el error rival no sólo no lo contrarrestó, peor, cayó en su propia telaraña mientras le daban lugar a que el excelso número diez se hiciera un picnic contra los argentinos, incluidos los tres drops que anotó en ese fatal primer tiempo.
Porque el problema de Los Pumas fue que tuvieron errores en casi todas sus líneas. No aprovecharon la ventaja de jugar 15 contra 14, ni se revelaron ante la adversidad. Las cosas con el correr de los minutos les salieron cada vez peor.
Cheika había entendido bien que el partido se iba a jugar entre los delanteros, lo que no previó fue la cantidad de yerros que sus dirigidos iban a cometer. Konck-on, malos pases, pérdidas de posesión y una desigualdad anímica que levantó aún más a los ingleses.
Este era el problema mental que tanto hablaba el entrenador, que aún sigue vigente. ¿Por qué este equipo no puede jugar dos partidos de la misma forma? ¿Por tiene tantas intermitencias sin poder resolverse? Este Mundial se preparó de una forma diferente, con un plantel híper concentrado y muy conectado, que lamentablemente, hoy no se notó.
¿Hay solución? Seguro, siempre hay solución debajo de la mesa. Dependerá de cómo asimilaron este duro golpe, que sin dudas ninguno esperaba. Trece días quedarán para repesar lo bueno y malo que se hizo contra Inglaterra. Samoa será el rival, con todo lo desorganizados que son los isleños para jugar y complicar los caminos. Que además son impredecibles como los mismísimos argentinos. El problema es que la cabeza de Los Pumas también lo es, hoy quedó nuevamente en evidencia.
Los Pumas son un equipo con varias caras y todavía todo depende de ellos. Hoy perdieron una gran oportunidad, dejaron pasar un tren llamado Inglaterra. Jugar con un hombre de más, algo que nunca se notó la noche de Marsella.
El Mundial continuará con partidos todos los días, que harán olvidar un poco la desazón que se vivió en Marsella. Queda camino por desandar, la pena es que se pudo dar un paso histórico para aumentar esa ilusión que traían. Ahora hay que ganar todo lo que queda para poder clasificar.
Los Pumas debutaron con una derrota. No quedaron muchas cosas para rescatar. El resto, de aquí en más dependerá de ellos. Samoa será un rival de cuidado y de ellos dependerá el futuro en el torneo. Lo de hoy fue muy pobre y habrá que mejorar. Eso es lo que deseamos todos.
Por Hernando De Cillia, de Rugby Champagne