Misión difícil, pero no imposible: el plan de Los Pumas para vencer a los All Blacks
Argentina enfrentará a uno de los grandes candidatos en un duelo que, tiempo atrás, parecía inalcanzable. Con dos triunfos recientes y un equipo en alza, Los Pumas sueñan con dar el golpe.
La cancha de Ferrocarril Oeste, en aquel 1985, explotada de fervoroso público pintando de celeste y blanco en las tribunas, empujaba con un scrum argentino que buscaba dar el golpe: llegar al try y vencer a Nueva Zelanda. No pudo ser esa vez, pero los 21 puntos del excelso Hugo Porta sirvieron para conseguir el primer empate ante los All Blacks, el temible rival de Los Pumas que siempre parecía invencible y será el último escalón a superar para lograr llegar a una final de Mundial por primera vez en la historia.
Es que queda lejano aquel duelo del año 2001, en el auge de la pumamanía, con un estadio Monumental repleto siendo testigo de lo que parecía éxito argentino. Un kick fallido de Felipe Contepomi cuando buscaba el lateral, una contra con el sello característico de los All Blacks, y el try de Scott Robertson para sumar otro triunfo a favor de los oceánicos. Curiosonamente, 22 años después, el argentino trabaja en el actual staff de Los Pumas y es candidato a ser el entrenador principal en un futuro cercano y el neozelandés será el head coach de su país desde 2024.
También olvidado en el sinfín de derrotas quedó un 19-25 del 2006, en un lluvioso Vélez que veía como se les escurría la última chance a Los Pumas con la posesión final a metros del ingoal de los rivales. En ese momento, jugar con los de negro no era cosa de todos los días. Recién volvieron a chocar en el Mundial 2011 con éxito de los neozelandeses. Desde 2012, la historia comenzó a cambiar: Argentina ingresó en el Rugby Championship y así el historial se fue acrecentando con -mínimo- dos duelos por año.
Seguramente ese roce fue necesario y clave en lo que vino después. Es inolvidable la jornada del 14 de noviembre de 2020, pandemia de por medio, con Sydney como sede, donde Los Pumas consiguieron el ansiado triunfo. Un merecido 25 a 15 contra todo pronóstico, con un notable partido de los dirigidos -en ese entonces- por Mario Ledesma. Argentina anotó con un try, una conversión y seis penales de Nicolás Sánchez; quién será suplente en el duelo semifinal y viene teniendo una destacada actuación con sus ingresos desde el banco en el Mundial que se disputa en Francia. De los titulares de aquel día, apenas seis argentinos repetirán en el duelo del viernes. Aquella jornada -también recordada por el fallido homenaje a Diego Maradona- generó el quiebre. Lo antes imposible, se convirtió en posible.
Argentina subió un escalón más al conseguir su segunda victoria ante los All Blacks en propio suelo neozelandés. Con 20 puntos de Emiliano Boffelli –titular en las semifinales- el equipo argentino se impuso con nitidez en Christchurch. Para Los Pumas haber ganado dos de los últimos siete enfrentamientos es la puerta de entrada al sueño de estar en la final del 28 en París. Es cierto, las tres veces que Nueva Zelanda ganó el Mundial, superó al equipo argentino en alguna instancia del certamen.
¿Qué argumentos llevan a pensar en un éxito de Los Pumas en las semifinales? Primero y principal, nadie duda del papel de candidato que tendrá a los All Blacks como amplio favorito a quedarse con el duelo. Sin embargo, la versión del equipo neozelandés durante el ciclo del head coach Ian Foster fue constantemente cuestionada. Y con razón. Derrotas impensadas, decisiones polémicas en el armado del equipo y un funcionamiento muy distante en la comparativa con otras interpretaciones del equipo que viste de negro. Nueva Zelanda perdió el partido inaugural ante el local Francia, su primera derrota en una fase de grupos en la historia de los Mundiales. Además, por primera vez clasificaron en segundo lugar en su zona. Igualmente, comenzaron la remontada en su rendimiento en el final de la fase regular y en cuartos eliminaron a Irlanda, número 1 del ranking, en un final dramático y con las herramientas de siempre: destrezas y brillo individual, un correcto trabajo colectivo, temple de acero en situaciones límites y un espíritu ganador notable.
“Tenemos que hacer el partido perfecto y que ellos no están tan iluminados”, destaca el propio Boffelli en la previa del duelo semifinal. Una verdad irreprochable a la que Argentina deberá sumarla una defensa firme y paciente, gran nivel de disciplina, fortaleza en las formaciones fijas y, sobre todo, un detalle no menor: estar en partido. Un resultado amplio en algún pasaje será irremontable. Diez de los titulares el próximo viernes estuvieron en el último triunfo ante All Blacks. Ya saben lo que es ganarle.
Pensando en el plan anti All Blacks, Los Pumas deberán mejorar el 82% de eficacia en el tackle que tuvieron en el duelo ante Gales. La defensa, en el duelo individual y de conjunto, será vital para sostenerse en partido ante la categoría de los jugadores como Mo'unga y Beauden Barrett. Mantener el 100% de efectividad en pelotas propias en el scrum y en el line out será muy importante. El regreso de Guido Petti durante la Copa del Mundo al equipo titular le otorgó mayor solvencia en esta última formación. También la inclusión de Juan Martín González en el puesto de ala tras la lesión de Pablo Matera, terminó siendo una buena noticia en el rendimiento del mendocino, pieza clave en los últimos triunfos resonantes de Argentina.
El duelo del pack de forwards será el primer testo para el equipo nacional, los All Blacks contarán con la titularidad de Samuel Whitelock –buscando ser el primer neozelandés en ganar tres títulos- sumándose a un grupo que ofrece garantías en el juego físico más una gran dinámica para neutralizar rivales. Los Pumas volverán a tener como titular al santiagueño Facundo Isa, pieza clave en el triunfo ante los galeses aportando su característica potencia para generar quiebres y poner la pelota adelante.
Por el lado de los backs, al margen de los dos estrategas antes mencionados, el seleccionado de Nueva Zelanda presenta con uno de los mejores medios scrum de la historia del rugby mundial, un centro notable como Jordie Barrett y talento puro en nombres como Rieko Ioane y Will Jordan. Argentina, por su parte, volverá a rotar su número nueve: Gonzalo Bertranou vuelve al equipo titular. Nuevamente es sorpresa la salida de Cubelli, sin lugar en los 23. Será clave el sostén en el medio de la cancha con Santiago Chocobares que recibió el alta médica tras su golpe en cuartos.
Otro detalle importante, será la eficacia de los pateadores: aunque suene increíble, los envíos a los postes no son el punto más alto de los dos habituales shoteadores de los All Blacks. En Argentina, Emilio Boffelli es el encargado de los remates con buenos números durante la Copa del Mundo. Y desde el banco, Nicolás Sánchez todavía no falló un remate en el Mundial. Sí Argentina consigue sumar varios de estos factores importantes, la misión será difícil pero posible.
*Por Fabián Taboada (periodista ESPN).