Las polémicas decisiones de Sánchez y Matera con sus cambios de equipos

Pablo Matera y Nicolás Sánchez tomaron la decisión de cambiar de aire justo en el año mundialista. Dos de los tres pumas con más caps en la historia (solo los supera Creevy) eligieron acordar sus llegadas a clubes de menor jerarquía, algo que hizo ruido al momento de los anuncios pero que tiene una explicación.

El apertura dejó las luces del Stade Francais, segundo equipo en la tabla de posiciones del rugby francés, para ser nuevo jugador del Brive, el colero en la clasificación. Los motivos son claros: el máximo anotador de Argentina en la historia quiere llegar con minutos y ritmo a la cita ecuménica de Francia 2023 luego de un año muy complicado por las lesiones.

En su nuevo elenco, el 10 ya suma cuatro partidos, el último siendo la gran figura del equipo en la victoria en el derby ante Clermont con tres puntos y diez tackles. Brive, que también contó con el mendocino Axel Muller,  cortó una racha de siete derrotas consecutivas y aspira a salvar la categoría. 

Sánchez intentará sumar la mayor cantidad de minutos de cara a un 2023 que tendrá como gran objetivo la Copa del Mundo de Francia. Para el tucumano será su cuarta participación, y por su edad, posiblemente también sea la última. Por eso el cambio de equipo, para poder llegar con el mejor nivel posible.

Pablo Matera tomó la misma decisión. Uno de los máximos referentes de Los Pumas se fue de un equipo gigante como Crusaders para disputar el ascenso japonés con la camiseta del Honda Heat. Los motivos en esta caso tienen que ver con una decisión personal del jugador de llegar descansado a su tercer Mundial, algo que no le había ocurrido en sus otras dos participaciones ecuménicas.

El tercera línea jugó en Inglaterra, Francia y Nueva Zelanda pero llegó a Asia para recargar energías y no tener tanto desgaste pensando en Francia 2023. En cuanto al nivel y roce, sin dudas que es un paso hacia atrás. Por el lado físico, puede ser una soución para tenerlo fresco en el Mundial.