Por la alta demanda, Google limita el acceso gratis a Gemini 3 Pro
La empresa decidió achicar el cupo de consultas diarias en sus herramientas de IA. El cambio afecta a quienes usan los servicios de Google de forma gratuita.
La alta demanda obligó a Google a restringir las funciones gratuitas, empujando a los usuarios más exigentes hacia los planes de pago.
Imagen generada con IALa noticia cayó como un balde de agua fría para muchos usuarios. Debido a la cantidad impresionante de gente que las usa, Google decidió poner un freno a las versiones Pro gratuitas de Gemini 3 y Nano Banana. La demanda superó lo que la compañía esperaba.
Desde su lanzamiento, estas herramientas se volvieron fundamentales para miles de personas. Sin embargo, el gigante tecnológico cambió las reglas del juego de un día para el otro. La razón es sencilla: los servidores no dan abasto. La popularidad de la inteligencia artificial creció tanto que la infraestructura se vio desbordada, y la empresa optó por recortar el servicio a quienes no pagan una suscripción.
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Lo llamativo es que esto se hizo casi en silencio. La empresa actualizó su página de soporte sin grandes anuncios, y muchos se enteraron recién cuando el sistema les negó el acceso. Antes, un usuario podía hacer hasta cinco peticiones diarias con Gemini 3 Pro sin problemas. Ahora, esa cifra es variable y depende del tráfico del momento, dejando a los usuarios "de a pie" con las opciones básicas mucho antes de lo previsto.
Menos funciones gratis en Gemini 3
El recorte no solo afecta al texto, sino también a la generación de imágenes. La herramienta Nano Banana Pro también sufrió la "tijera": de las tres imágenes diarias que se podían crear, ahora solo permiten dos. Parece un cambio chico, pero para el que lo usa todos los días, se nota.
Para los que usan estas aplicaciones para trabajar o investigar, la situación es un dolor de cabeza. Imaginate estar en medio de una tarea importante y que la herramienta te deje a pata. Si dependés de esto para tu rutina, la inestabilidad es un problema serio. Quienes hacen un uso casual quizás no lo sientan tanto, pero los usuarios intensivos ven cómo se les complica el día.
La molestia de usuarios por el límite de la inteligencia artificial Google
Hay un detalle que molesta bastante a la comunidad: la falta de aviso claro. Cuando llegás al límite que Google impuso, el sistema no te avisa que te quedaste sin crédito. Simplemente, te pasa a modelos menos potentes y efectivos. De golpe, las respuestas pierden calidad y uno no entiende bien por qué.
En este mundo digital que va a mil por hora, tener un acceso que va y viene no sirve de mucho. El mensaje que baja la empresa parece bastante directo: si querés estabilidad, velocidad y que la herramienta responda siempre bien, vas a tener que meter la mano en el bolsillo y pagar un plan. La época de la barra libre total en la tecnología de punta parece que se está terminando.