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Regalos y Navidad: las distintas versiones a Papá Noel alrededor del mundo

De la Navidad nacieron distintos mitos y leyendas sobre regalos que se arraigaron fuertemente en las tradiciones locales.

Regalos y Navidad: las distintas versiones a Papá Noel alrededor del mundo.

Regalos y Navidad: las distintas versiones a Papá Noel alrededor del mundo.

La Navidad se festeja a partir de la celebración del nacimiento de Jesús, el ungido salvador de la humanidad según la tradición cristiana. Cada 25 de diciembre para la tradición romana y cada 7 de enero para la tradición ortodoxa, se recuerda este nacimiento único, el más importante de la humanidad que ha trascendido todas las culturas.

Más allá de la fe de cada quién, el nacimiento de Jesús es ampliamente conocido y celebrado en todos los puntos cardinales del globo desde la creación o instauración de la fiesta en el año 336 en Roma. A pesar de este origen religioso, distintas tradiciones cambiaron algunos aspectos o sumaron condimentos a la fiesta que trasciende todo tipo de fronteras.

Entre todos estos cambios que introdujo la propia religiosidad cristiana, el sincretismo, las leyendas y hasta el mero consumismo, nació Papá Noel, un tierno anciano del Polo Norte que reparte regalos en la madrugada del 25, pero no es el único con esta ardua tarea de recorrer kilómetros en tan solo un día para que nadie en el mundo se quede sin regalo.

Papá Noel: el traje rojo, la gaseosa y las chimeneas

La tradición nace en la cultura anglosajona, inspirados en la historia de San Nicolás de Mira (actual Turquía), un obispo católico que vivió entre los siglos III y IV. Este hombre de fe, según la tradición cristiana, regalaba a escondidas regalos y dinero a las familias pobres, sin que siquiera los que recibían los regalos pudieran verlo.

En tiempos de la expansión de su historia en la Europa medieval, San Nicolás llegó a formar parte de la tradición sincrética que se formó en Europa, muchas basadas en una intención de la Iglesia por reemplazar lo pagano y otras por una mera confluencia de mitos y relatos cristianos. En este tiempo comienza a aparecer la imagen de la barba y la vestimenta cambia según la región, pero predomina la indumentaria eclesiástica.

Mientras esta expansión ocurre, nacen también otros nombres y mixturas con leyendas paganas que dan origen a nuevos personajes, pero de ellos hablaremos más adelante. En este tiempo nace también "Sinkterclass", palabra que dará origen también a "Santa Claus", deformación que se conforma en los Estados Unidos mediante la fundación de Nueva Ámsterdam, actual Nueva York. Así, en 1823 se publica A visit from St. Nicholas de Clement Clarke Moore, donde se introduce el trineo volador, los renos y la entrada por la chimenea para dejar los regalos.

Ya a finales del siglo XIX, el caricaturista alemán Thomas Nast, padre del burro demócrata, el elefante republicano y el Tío Sam, confecciona también la imagen actual de Papá Noel: gordo, alegre y barba blanca. Luego de ello, Coca Cola utiliza la imagen para vender el producto y lo viste de rojo y blanco, usando los colores de la marca para que queda vinculada para siempre, siendo la empresa que definitivamente instala, por su alcance comercial, a Papá Noel en todo el mundo.

El Niño Jesús: la tradición católica que compite con Papá Noel

En Europa Central y Portugal, ante la presencia de tantos mitos y al instalarse la costumbre de dar regalos en Navidad, comenzó a instalarse que no era San Nicolás, Papá Noel ni Santa Claus el que daba los regalos, sino que era el Niño Jesús el que los llevaba, bajo el nombre de Christkind, Jeíšek o Menino Jesús.

Esta tradición quedó muy instalada en Alemania, Austria, Suiza y República Checa, ya que en estos países hubo una alta presencia del luteranismo, corriente protestante de Martín Lutero que buscaba, no solo reformar la Iglesia sino también erradicar todo signo ajeno al cristianismo de Europa, principalmente los paganos y sincréticos. San Nicolás era uno de sus objetivos, ya que lo consideraba un ídolo como el becerro de oro, tanto a él como a todos los santos, en razón de que el protestantismo propone que no existen intercesores entre Dios y los hombres, sino un vínculo único directo. En Portugal, en cambio, la diferencia con San Nicolás se asemeja más a los motivos españoles.

Los Reyes Magos: la tradición española

España fue siempre el faro del Occidente cristiano y la "mano derecha" de Roma, pero la tradición del "Niño Jesús" entregando regalos también tuvo su lugar en la península ibérica, como así también la leyenda de San Nicolás. A pesar de ello, esa tradición cristiana tan arraigada de España hizo que se construyera la costumbre de los regalos en torno a los Tres Reyes Magos.

Los Reyes Magos, según la Biblia, fueron magos de Oriente que, siguiendo una estrella, fueron guiados hasta Belén para celebrar el nacimiento del Niño Jesús tras un largo camino. En ningún momento de toda la saga bíblica se habla de "tres" ni de "reyes", pero en España se afincaron fuertemente estos personajes para la fiesta de la Epifanía del Señor que se celebra cada 6 de enero. Originalmente, en España, no se entregaban regalos el 25 de diciembre, sino que se dejaba para los primeros días del año siguiente.

La costumbre de los regalos en esta fecha se basan en que los magos de Oriente llevaron regalos al Niño Jesús -oro, mirra e incienso-, elementos vinculados con la nobleza de entonces, reconociendo a este pequeño como Rey sobre los Reyes. De ahí la "Epifanía del Señor", revelación de la Verdad divina de que, por encima de los poderosos, está el omnipotente. Bajo este concepto teológico se forma en España la idea de los "Reyes", quienes también cumplen el cometido de representar a los tres continentes mediante su raza: el europeo Melchor, el asiático Gaspar y el africano Baltasar, destacando que los reyes de todo el mundo se arrodillan ante Dios.

Las extrañas tradiciones escandinavas

Con una gran influencia de las tradiciones nórdicas, en los países nórdicos existe una cabra de paja que deja regalos en la noche de Navidad. En Suecia, este "animal" recibe el nombre de Julbock o Yule Goat, mientras que en Finlandia se la conoce como Joulupukki.

Según el mito, esta cabra vive en Laponia, mito por el que se cree que se ubicó a Papá Noel en el Polo Norte, una vasta región geográfica del norte de Europa, que se extiende por Noruega, Suecia, Finlandia y Rusia. A pesar de su fuerte arraigo con la antigüedad nórdica, con el tiempo fue perdiendo popularidad y ahora es una decoración típica, mientras que la tarea de los regalos quedó relegada al gran hombre vestido de rojo.

Ahora, vale aclarar por qué se eligió una cabra como sujeto que reparte regalos viajando desde Laponia. La tradición nace del sincretismo con los antiguos pueblos nórdicos, que cada año esperaban estos tiempos de largas noches para sacrificar una cabra pidiendo a los dioses que el siguiente año haya mejores cosechas en sus poblados y así evitar hambrunas. Con la llegada del cristianismo, los sacrificios animales son eliminados, pero persiste la imagen de la cabra como símbolo.

Befana: la tradición italiana que combina folclore con religiosidad

Al igual que en la tradición española, los regalos llegan a las casas en la noche del 5 al 6 de enero, pero a diferencia de hacerlo los Reyes Magos, los regalos son llevados por la Befana, una mujer que los habría recibido en su largo camino a Belén.

Según cuenta la leyenda de la Befana, esta mujer recibió a los Reyes Magos en su hogar y les dio dulces para que recuperaran fuerzas y puedan seguir su camino, pero ellos le ofrecieron que los siga, así ella también podía conocer al Niño que anunciaban las profecías, pero ella se negó.

Cuando ellos partieron la mujer se arrepintió y salió a buscarlos incansablemente, pero nunca lo logró. Ante esta situación, fue parando en cada casa dejando dulces a cada niño que se encontrara con la esperanza de que alguno de ellos fuera el Niño que los Reyes Magos querían presentarle a la Befana. A la misma se la describe como una anciana con una escoba que va por los caminos con el objetivo de regalar caramelos y chocolates a cada niño que se haya portado bien y carbón a los que no lo hayan hecho.

Ded Moroz: el personaje folclórico que se transformó en un Papá Noel comunista

Desde mucho tiempo antes de la Revolución de Octubre, en Rusia los regalos eran llevados a cada casa por el Abuelo Frío (Ded Moroz), un hombre viejo de barba blanca como Papá Noel, pero en muchas ocasiones graficado con un traje azul en lugar de rojo.

A partir de la Revolución en 1917 y la prohibición de cualquier religión en todo territorio gobernado por los soviets, la fiesta de Navidad y la figura de Ded Moroz se eliminaron. Pocos años más tarde, en medio de la debilidad del Gobierno bolchevique de los primeros años de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas, la administración Lenin permitió ciertas imágenes folclóricas con el objetivo de fortalecer la relación con el pueblo tras las hambrunas y así volvió el gran hombre de traje azul pero sin vínculos religiosos.

Este personaje tiene su versión ucraniana conocida como Did Moroz, siendo similar a su par ruso pero con más condimentos folclóricos de la región al sur de Rusia, mientras que en dicho país también se emplea la figura de "La araña navideña", un personaje que decora los árboles de las casas augurando buena fortuna.

San Nicolás: el obispo original del relato

Como se mencionó previamente, San Nicolás de Mira o Bari es el inicio de la leyenda de los regalos en Navidad que, con la mixtura con otras culturas, dio lugar a nuevos personajes como los mencionados. A pesar de ello, muchos tienen aún la tradición de que es el propio santo quien lleva los regalos, aunque con sus particularidades como en los Países Bajos y Bélgica donde se lo llama Sinterklaas y es un obispo español.

En Europa Central y Alemania, San Nicolás visita las casas el 6 de diciembre, día del santo, y se lo conoce Sankt Nikolaus y a veces va acompañado de Knecht Ruprecht, un servidor que castiga a los niños que se portan mal. En Suiza, San Nicolás es conocido como Samichlaus y su servidor es Schmutzli. En Hungría, en cambio, el santo es conocido como Mikulás.

Los santos y personajes nacionales

Grecia cambia de santo y, en lugar del turco San Nicolás de Mira, los regalos son llevados por San Basilio, quien llega a las casas el 1° de enero. También Estonia tiene un personaje distinto a los demás, como es Jõuluvana, una versión nacional que vive en los bosques del más septentrional de los países bálticos. Armenia también tiene su propio "Papá Noel", que se llama Dzmer Papik (Abuelo Invierno) y es una figura que nace del cristianismo armenio.

En Islandia, único con esta tradición de los escandinavos, están los Jólasveinar, un grupo de 13 personajes, en algunos casos 13 gatos, que llegan uno por día los 13 días previos de Navidad, pero con la incertidumbre de que pueden estar llevando regalos o haciendo bromas según toque a cada uno.