El drama de los vecinos de Guaymallén por el desborde cloacal: "Tengo la casa cerrada con trapos"
Mientras Aysam trabaja en reparaciones, los vecinos de Guaymallén soportan olores y riesgos sanitarios por un desborde cloacal en Acceso Este y Blas Parera.

Desborde cloacal en la Lateral Norte del Acceso Sur y Blas Parera, en el departamento de Guaymallén. Foto: Mercedes Gómez/ MDZ
Mercedes Gómez/ MDZUn desborde cloacal en la lateral norte del Acceso Este y Blas Parera, generó malestar en los vecinos de Guaymallén debido a los fuertes olores. El incidente, vinculado a obras de reparación de Aguas Mendocinas (Aysam), reactivó reclamos por la gestión de residuos en la zona, donde ya existen denuncias por contaminación de cultivos con aguas servidas.
Los trabajos de reparación se llevan adelante en la Lateral Norte entre Blas Parera y Allayme, y desde Aysam preven que durará 30 días. "Se trabajará de lunes a viernes, en la franja horaria de 8 a 17 h. El sábado será de 8 a 14 h", dicen en sus redes oficiales. Si bien solicitan la colaboración de los vecinos quienes están dispuestos, pero no para este tipo de obras, no contaban con derrames de líquidos cloacales en el frente de su casa. "Uno espera que se resuelva, pero nunca pensé que tendría que vivir una situación así, menos frente a un parque que debería ser un lugar agradable.
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La respuesta técnica
Según Aysam, la rotura de un colector cloacal obligó a reemplazar 130 metros de cañería. Para mitigar el desborde, se instaló un bypass que funciona con bombas que redirigen los efluentes a una boca de registro aguas abajo. "Trabajamos en la limpieza con camiones hidrocinéticos desde Hilario Cuadros hacia el oeste", explicaron desde la empresa.
El encargado de la obra que se encontraba en el lugar, añadió que se aplicará cloro y se realizará una inspección exhaustiva, aunque sin fecha concreta de finalización. A su vez, aseguró que el tamaño del caño (que se puede ver en las fotos y videos de esta nota) es de mucha menos dimensión que los que se encuentran en la zona de Corralitos.
Vecinos de Guaymallén, en alerta
Los residentes denuncian que el problema persiste desde hace al menos una semana. Una vecina relató a MDZ que, al regresar de un viaje, encontró la zona inundada con aguas grises en la avenida y un "olor espantoso". "Tengo la casa cerrada con trapos para que no entre el hedor", dijo, y criticó la falta de comunicación oficial. Además, cuestionó las tarifas del servicio: "Pago $35.000, y en Chile, con servicios privados, es más barato".
Además, se refirió a un problema clave para cualquier familia guaymallina: las tardes en la avenida de acceso. "Aquí la gente viene a hacer picnic. ¿Cómo van a poder disfrutar del parque? El olor es espantoso, sobre todo por la tarde. Ahora mismo no se siente tanto porque han hecho correr agua limpia de un zanjón para diluir la suciedad, pero esta contaminación lleva así por lo menos cinco días".
"Lo que yo espero es que el gobernador Alfredo Cornejo venga y se siente aquí a aguantar el olor que tenemos que soportar", dijo la vecina señalando su vereda. "Tengo toda la casa cerrada, incluso puse trapos en las puertas para que no entre el hedor", agregó.
Contexto: crisis ambiental recurrente
El derrame se suma a un escenario crítico en Guaymallén. En mayo, más de 500 hectáreas de cultivos fueron afectadas por riego con agua contaminada del canal Pescará, según reportó MDZ. Organizaciones locales exigen la declaración de emergencia ambiental, alegando riesgos sanitarios y económicos. Casos similares se han registrado en países como India, donde el río Yamuna alcanzó niveles de espuma tóxica en 2023, o en Perú, donde vertederos informales contaminaron el Río Rímac.
Expertos consultados también en este medio señalan que los derrames en redes cloacales suelen deberse a infraestructura obsoleta o falta de mantenimiento preventivo. En Argentina, el 50% de los sistemas de saneamiento requieren inversiones urgentes, según un informe del 2024 de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos). Aysam asegura que las obras en curso buscan modernizar la red, pero los vecinos exigen mayor celeridad y transparencia.