A un año de la desaparición de Loan: una herida abierta y un llamado urgente contra la trata de personas
La desaparición de Loan Danilo Peña refleja las graves fallas del sistema en la protección infantil y la lucha contra la trata en Argentina.

Loan Danilo Peña se encuentra desaparecido desde el 13 de junio de 2024.
NAEl 13 de junio marcó un año desde la desaparición de Loan Danilo Peña, un hecho que conmocionó al país y dejó al descubierto las profundas fallas del sistema en la protección de niños.
Este caso, que sigue rodeado de dudas e irregularidades, volvió a poner sobre la mesa la problemática de la trata de personas, una realidad tan invisible como persistente en Argentina.
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El problema que destapó el caso Loan Danilo Peña
La trata no es un delito lejano ni ajeno: ocurre aquí, ahora, en distintas formas, con víctimas de todas las edades y condiciones sociales. Reclutamiento, traslado, retención y explotación: este ciclo perverso sigue operando en la sombra, amparado por la indiferencia, el desconocimiento y, en no pocos casos, la complicidad de quienes deberían actuar para erradicarlo.
Argentina lleva años enfrentando este flagelo. Desde la sanción de la Ley 26.364 en 2008 —y su posterior modificación en 2012— se han logrado avances en la persecución penal y en la asistencia a víctimas. Pero los números siguen siendo alarmantes y evidencian que no alcanza con leyes si no hay voluntad sostenida, recursos adecuados y compromiso político real.
Según datos del Programa Nacional de Rescate, la Línea 145 —destinada a recibir denuncias de trata— recibe una llamada cada cinco horas. Detrás de cada una hay personas atrapadas en redes de explotación sexual, laboral y otras formas de esclavitud moderna. De hecho, entre 2015 y 2023 se recibieron casi 5.000 reportes que involucraban a niños, niñas y adolescentes como víctimas. En muchos casos, el primer contacto se dio a través de grooming, redes sociales o videojuegos en línea. Según Missing Children actualmente hay en Argentina 138 niños desaparecidos.
El 49% de las denuncias por trata en Argentina están vinculadas a la explotación sexual, seguida por la laboral con un 21%. Pero también existen otras modalidades menos visibilizadas: tráfico de órganos, servidumbre doméstica, matrimonios forzados, reclutamiento para el narcotráfico. Sí, todo esto ocurre en nuestro país.
La responsabilidad de la Justicia y la sociedad
La Justicia ha dictado numerosas condenas, pero aún existen enormes desafíos: la corrupción, la falta de articulación entre organismos, la lentitud de los procesos judiciales, la revictimización, la desprotección. Muchas víctimas no denuncian por miedo a represalias o por desconfianza en el sistema, y esa desconfianza, lamentablemente, no es infundada.
Frente a esta realidad, la sociedad también tiene una responsabilidad. No podemos seguir viendo la trata como una problemática ajena o marginal. La trata es un síntoma profundo de desigualdad, pobreza estructural, violencia de género y vulneración sistemática de derechos.
Combatirla implica mucho más que castigar a los culpables: implica crear redes de contención, educar, informar, garantizar derechos y construir una cultura donde ninguna vida sea descartable.
A un año de la desaparición de Loan, el dolor sigue siendo inmenso, pero también debe ser motor de acción. No podemos permitir que este y otros casos caigan en el olvido. Recordar es exigir justicia, y exigir justicia es también pelear por una Argentina donde la trata no tenga lugar.