¡Viva la Patria! Una mendocina fanática de San Martín se tatuó una frase del libertador

En medio de los festejos de la Semana de Mayo, una joven mendocina sorprendió a sus seguidores con un curioso tatuaje que le valió los aplausos y elogios de los usuarios de las redes sociales.
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La joven guía de turismo decidió tatuarse en el antebrazo la conocida frase de San Martín “Seamos libres y lo demás no importa nada” para inmortalizar en su piel su pasión y fanatismo por el Padre de la Patria.
“Quizás para muchos no signifique nuestra historia… Para mi es identidad, amor, comprensión y empatía. Es poder entender quiénes fuimos para dejar un quienes seremos. Pero en nuestra trayectoria tan extensa donde hemos sufrido, batallado y llorado, me queda una persona en la cual he aprendido a amar, entender y querer saber todo de él… Hablo de nuestro Padre de la Patria, de nuestro prócer, del hombre más audaz e inteligente: San Martín”, escribió en un posteo de Instagram juntos a la foto de su brazo y una imagen de San Martín.
“Quienes me conocen, quienes han oído mis historias sobre él, sabrán que estoy completamente obsesionada sobre lo que hizo. Y es por eso que hoy lo llevo en mi piel. Con la frase que más me representa y nos representa a todos. Gracias a él tenemos una tierra digna de vivir. Y gracias a él somos libres. Pues “Seamos libres, y lo demás no importa nada”. Para este mes de mayo tan patrio… viva la Patria”, agregó la joven mendocina.
El origen de la frase de San Martín
“Seamos libres y lo demás no importa nada” es una de sus frases más conocidas de José de San Martín. La frase es parte de la proclama del 19 de julio de 1819 firmada por el general y que sintetiza su anhelo de continuar con la gesta libertadora.
La proclama completa
Compañeros del Ejército de los Andes: Ya no queda duda de que una fuerte expedición española viene a atacarnos; sin duda alguna los gallegos creen que estamos cansados de pelear y que nuestros sables y bayonetas ya no cortan ni ensartan; vamos a desengañarlos. La guerra se la tenemos que hacer del modo que podamos. Si no tenemos dinero, carne y un pedazo de tabaco no nos han de faltar; cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con las bayetitas que nos trabajan nuestras mujeres y si no, andaremos en pelota como nuestros paisanos los indios. Seamos libres y lo demás no importa nada. La muerte es mejor que ser esclavos de los maturrangos. Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano hasta ver el país enteramente libre, o morir con ellas como hombres de coraje.