Las tres enfermedades de riesgo que Mendoza ataca con estrategias sanitarias

La provincia de Mendoza intensifica sus esfuerzos en materia de salud pública, implementando planes específicos para enfrentar el dengue, la viruela del mono y la sífilis, tres enfermedades que, aunque presentan distintos niveles de riesgo en la región, son objeto de preocupación constante para las autoridades sanitarias. Durante la reciente inauguración del Laboratorio Núcleo en el Hospital Lencinas, el ministro de Salud, Rodolfo Montero, junto con la directora de Epidemiología, Andrea Falaschi, ofrecieron un detallado informe sobre la situación actual y las medidas que se están tomando para prevenir y controlar estas patologías.

Dengue: sin casos activos, pero con un plan integral de prevención

A pesar de no haber casos activos de dengue en Mendoza, las autoridades lanzaron un plan integral que busca prevenir futuros brotes. Según el ministro Rodolfo Montero, este plan de abordaje fue implementado hace aproximadamente tres semanas y abarca diversas medidas que van desde el trabajo de campo con los municipios hasta el fortalecimiento de la atención en la red pública de salud. “Ya tenemos un plan de contingencia que incluye acciones preventivas como el descacharreo y la colaboración activa con los municipios. En Mendoza no se vacunará contra el dengue por el momento, ya que seguiremos las recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación”, explicó Montero.

Este enfoque, además de priorizar la prevención, se sustenta en el hecho de que la provincia no alcanza los umbrales epidemiológicos requeridos para la vacunación masiva. Así lo detalló Andrea Falaschi, quien explicó que la vacuna contra el dengue solo se recomienda en áreas con una tasa de incidencia de 4.000 casos por cada 100.000 habitantes. En Mendoza, esa tasa es significativamente menor, fluctuando entre 200 y 600 casos por cada 100.000 habitantes. “El plan que venimos ejecutando se enfoca en la gestión de arbovirosis, con una vigilancia epidemiológica activa, control vectorial y una constante comunicación con la comunidad para prevenir nuevos casos”, agregó Falaschi, subrayando la importancia de mantener estas medidas de cara a la próxima temporada de calor, cuando este mosquito es más activo.

Viruela del mono: preparación y detección.

Otro de los temas abordados por las autoridades fue la viruela del mono, una enfermedad que ha generado alerta desde 2022. En Mendoza, se registraron 18 casos sospechosos desde el año pasado, de los cuales 10 fueron confirmados como positivos. Falaschi destacó que este año solo se ha diagnosticado un caso en la provincia, en un paciente que contrajo el virus en Brasil.

“Hasta el momento no hemos registrado casos de la nueva variante emergente en África, que afecta principalmente a mujeres y niños, pero estamos preparados para realizar los diagnósticos necesarios mediante pruebas de PCR”, explicó la directora de Epidemiología, quien también aclaró que la provincia continúa en alerta, vigilando de cerca la posible aparición de nuevos casos. 

La preparación de Mendoza frente a la viruela del mono incluye la capacidad para realizar diagnósticos en tiempo real y un monitoreo constante de los viajeros que puedan haber estado en contacto con zonas afectadas, como parte de un esfuerzo global de contención.

Sífilis: con necesidad urgente de reforzar la prevención.

La sífilis está experimentado un resurgimiento en Mendoza. Esta enfermedad de transmisión sexual, altamente prevenible y tratable con penicilina, registró cifras estables en la provincia, pero su persistencia preocupa a las autoridades sanitarias. Andrea Falaschi detalló que la transmisión sexual sigue siendo la principal vía de contagio, aunque la transmisión de madre a hijo durante el embarazo es una de las complicaciones más graves. 

“Actualmente, Mendoza registra entre 1.400 y 1.600 casos de sífilis al año, y en lo que va de 2024, ya hemos confirmado alrededor de 1.000 casos”, señaló Falaschi. A pesar de la disponibilidad de tratamientos efectivos, la principal dificultad reside en la falta de adopción de métodos preventivos, como el uso del preservativo, que sigue siendo la forma más simple y eficaz de evitar el contagio.

Falaschi hizo un llamado a la comunidad para reforzar las medidas de prevención y educación, destacando la importancia del uso de preservativos y el control prenatal para prevenir la transmisión congénita de la enfermedad. Las autoridades sanitarias también están trabajando en campañas de concientización para alertar a la población sobre los riesgos de la sífilis y la necesidad de acudir a controles médicos regulares.

El ministro Montero y la directora Falaschi coincidieron en que la clave para enfrentar estas enfermedades es la coordinación y la implementación de planes a largo plazo. Mendoza demostró que está preparada para enfrentar los desafíos sanitarios que representan el dengue, la viruela del mono y la sífilis, pero la prevención sigue siendo fundamental.