Mientras el Gobierno celebra la baja de la inflación, 6 de cada 10 niños argentinos son pobres

A las alarmantes cifras de pobreza que días atrás anunció el Unicef Argentina, señalando que un millón de niños se van a dormir sin cenar, se suman los datos de la Universidad Católica Argentina (UCA), que revelan que el 63% de los chicos y adolescentes del país son pobres.

En su reciente informe "Trazando el Camino: Privaciones Estructurales, Avances y Desafíos en los Derechos de la Infancia y Adolescencia. Argentina 2010-2023", realizado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina, la UCA dio a conocer este jueves, que de ese 62,9% de los menores pobres que viven en la Argentina, el 16,2% se encuentran en situación de indigencia.

Se trata de las cifras más altas registradas desde 2010, según el documento. Comparando con los datos publicados en el último censo oficial (2022), se deduce que hay 7.685.436 niños y adolescentes (de 0 a 17 años) se encuentran en situación de pobreza y entre ellos, hay 1.979.397 que son indigentes.

"El esfuerzo de los hogares y la cobertura de las políticas públicas han tenido un papel crucial en la mitigación de la pobreza, pero persisten desafíos estructurales en la economía que requieren atención, y que ejercen un fuerte impacto en las estructuras de oportunidades de los hogares y sus miembros niños, niñas y adolescentes", señalaron los autores del documento que se conoció este jueves.

En el marco de los estudios, la UCA construyó un índice de pobreza multidimensional que establece un doble umbral de carencias, uno total y otro severo. "Se seleccionan seis dimensiones de derechos: alimentación, saneamiento, vivienda, salud, información y estimulación/educación", explicaron. En  ese marco, se obtuvo que el 56,3% de los chicos y adolescentes fue pobre multidimensional. En un 16,1% en niveles severos, un porcentaje tan alarmante como la de indigencia monetaria infantil (16,2%). 

El informe señala sobre los problemas básicos que tiene la población más joven de Argentina al evaluar los derechos de niños, niñas y adolescentes de la Argentina urbana desde 2011.

En los últimos 13 años, se observó un aumento en la cantidad de hogares y personas con problemas para el acceso a una canasta básica alimentaria o total, con una suba pronunciada en la pobreza. 

Desde la UCA enfatizaron "el esfuerzo de los hogares y la cobertura de las políticas públicas han tenido un papel crucial en la mitigación de la pobreza, pero persisten desafíos estructurales en la economía que requieren atención, y que ejercen un fuerte impacto en las estructuras de oportunidades de los hogares y sus miembros niños, niñas y adolescentes".

El estudio evaluó también el impacto del coronavirus fue significativo y "regresivo", en cuanto al acceso a la salud, educación, crianza y socialización. Pese a que a partir de 2023 se retornaron a las situaciones previas al covid, el cumplimiento de ciertos derechos básicos fue desigual.