Generación Z

De cada 10 jóvenes, 4 beben alcohol, a pesar de ser conductores designados

En estos tiempos de fin de año, llegan las reuniones sociales y laborales y los jóvenes están más expuestos frente a la responsabilidad del consumo de alcohol al volante.

Mariela Mociulsky martes, 12 de noviembre de 2024 · 07:00 hs
De cada 10 jóvenes, 4 beben alcohol, a pesar de ser conductores designados
Resulta fundamental entender cuál es el vínculo entre los jóvenes y su percepción de riesgo en relación al alcohol. Foto: Imagen ilustrativa / Archivo MDZ

En un contexto de mayor circulación debido a la llegada de las temperaturas más agradables, las fiestas y despedidas de fin de año, resulta fundamental entender cuál es el vínculo entre los jóvenes y su percepción de riesgo en relación al alcohol, para plantear medidas y modos de comunicación efectivos. 

Por ejemplo, en uno de los estudios que Trendsity llevó adelante junto a Heineken, enfocado en los hábitos de consumo de alcohol de los argentinos, se comprobó que la figura del "conductor designado" ha ganado conocimiento a la hora de planificar las salidas grupales. Asimismo, uno de los hallazgos que presentó el estudio refleja que el 55% de los jóvenes de entre 18 y 24 años afirma elegir siempre a un conductor responsable que no beba cuando salen en grupo y saben que va a consumirse alcohol.

El 55% de los jóvenes de entre 18 y 24 años afirma elegir siempre a un conductor responsable.

Sin embargo, los datos muestran una disonancia entre la toma de conciencia y el comportamiento real: el 38% de la Generación Z (jóvenes entre 18 y 24 años) admite beber alcohol a pesar de haber sido designado como conductor responsable. Este indicador es aún más preocupante y asciende entre los de 25 a 34 años. Es decir, casi la mitad de dicho tramo etario (47%) reconoce haber consumido alcohol bajo la figura de conductor designado

Este comportamiento pone de manifiesto la complejidad del desafío que enfrentan tanto las empresas que se dirigen a este segmento como los funcionarios responsables de diseñar las políticas. Los jóvenes de la Generación Z tienen una relación distinta con el consumo del alcohol en comparación con las generaciones anteriores. A pesar de estar más expuestos a los peligros del tránsito —ya que el 41% de las víctimas fatales en accidentes de tránsito tienen entre 15 y 35 años— son también quienes, paradójicamente, declaran utilizar más estrategias preventivas que en otros tramos de edades, estrategias como la designación de un conductor designado

Los jóvenes de la Generación Z tienen una relación distinta con el consumo de alcohol en comparación con las generaciones anteriores.

El informe de siniestralidad vial fatal de 2023, publicado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), respalda esta preocupación. Durante ese año, 4.403 personas murieron en accidentes de tránsito en Argentina, y los jóvenes continúan siendo uno de los grupos más afectados. Los conductores más jóvenes no solo tienen mayor exposición, sino que también están involucrados en accidentes con mayor frecuencia.

Las empresas, por su parte, deben estar atentas a estos patrones de comportamiento si desean conectar de manera efectiva con las nuevas generaciones.

Los jóvenes de la Generación Z son más conscientes de los riesgos del alcohol 

También están impulsados por valores distintos a los de las generaciones anteriores. Para estos consumidores, valores como la transparencia y la responsabilidad social son decisivos a la hora de elegir qué marcas respaldar y qué productos consumir. Esta transformación cultural obliga a las empresas a alinear sus estrategias de marketing con estos principios si quieren lograr una conexión auténtica con sus audiencias más jóvenes.

Por otro lado, si bien la presencia de controles de alcoholemia ha contribuido a que más jóvenes designen conductores sobrios (8 de cada 10 cree que la existencia de estos controles predispone a la elección de un conductor designado), es evidente que estas medidas no son suficientes por sí solas. La fiscalización actúa como un disuasivo eficaz, pero también subraya que todavía queda un largo camino por recorrer en términos de educación y prevención. A pesar de la existencia de controles y leyes, 6 de cada 10 jóvenes de entre 18 y 34 años admite haber aceptado viajar con un conductor que había consumido alcohol. Este es un riesgo innecesario que revela una falta de conciencia sobre las verdaderas consecuencias del alcohol al volante.

La presencia de controles de alcoholemia ha contribuido a que más jóvenes designen conductores sobrios.

Cómo podemos resolver esta paradoja

Por un lado, los Centennials parecen ser más conscientes de los riesgos del consumo de alcohol al manejar. Por otro, los datos revelan que siguen tomando decisiones peligrosas, ya sea por presión social o por subestimar los efectos del alcohol. En este punto, tanto el sector privado como el público deben trabajar en conjunto para fortalecer los mensajes de responsabilidad y, lo que es más importante, fomentar un cambio cultural que priorice la seguridad y la prevención.

Resulta fundamental entender cuál es el vínculo entre los jóvenes y su percepción de riesgo en relación al alcohol.

Por todo esto, las marcas que tienen en cuenta la responsabilidad y el cuidado, empatizan con los valores de las nuevas generaciones. Para los jóvenes de la Generación Z, es crucial que las empresas no solo promuevan prácticas seguras, sino que también demuestren un compromiso con los valores de prevención, seguridad y transparencia. 

Aquellos que logren alinearse con estos principios pueden ganar la lealtad de los consumidores jóvenes y contribuir a un cambio cultural necesario.

Mariela Mociulsky.

Mariela Mociulsky – CEO y fundadora de la Consultora Trendsity

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