La ley ómnibus atenta contra bosques nativos mendocinos: por qué y cuáles son
En medio del incendio en Los Alerces, investigadores del Conicet advierten sobre el cambio de leyes ambientales que perjudican a los bosques nativos. Piden que el Congreso rechace esos puntos.
Científicos, científicas y docentes del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) se sumaron al pedido de investigadores de otras regiones para que el Congreso rechace los cambios propuestos en las leyes ambientales. Según consideraron, la ley ómnibus atenta contra los Bosques Nativos y el agua de Mendoza porque modifica leyes que "garantizan el cuidado de recursos que hacen posible la vida y el desarrollo productivo del país y de la región".
Los más de 30 científicos, científicas y docentes del Conicet y de la UNCuyo, que desde hace décadas trabajan en Mendoza, participando en el Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos, elevaron un nota a diputados y senadores nacionales por Mendoza. En la misma, expresan su preocupación respecto a las modificaciones propuestas en las leyes ambientales tales como la Ley de Glaciares, Ley de Bosques Nativos, Ley de Manejo del Fuego y Ley de Semillas que "fueron construidas a través de prácticas democráticas ejemplares a nivel mundial y que nos posicionan como país referente en protección ambiental".
Los bosques más destacados de Mendoza "son los bosques de algarrobo de las llanuras orientales de la provincia (bosques de la Reserva Telteca y la Reserva de Ñacuñán), bosques de la cuenca inferior de los ríos Diamante y Atuel; bosques ribereños de montaña de chacay y de maitén en la cuenca del río Blanco, Área Ambiental Potrerillos, cuenca del río Tunuyán superior y cuenca del río Malargüe", explicó a MDZ la investigadora del IADIZA Claudia Campos. Junto con los glaciares y la biodiversidad, estos bosques son parte de los recursos naturales de la provincia que aún están conservados.
A pesar de haber sido "diezmados durante la primera mitad del siglo XX por explotación irracional y, en la actualidad, se conservan importantes relictos de muy lenta recuperación", señalan los investigadores en el texto enviado a los legisladores. En el contexto de la ola de calor más fuerte y duradera de la historia, derogar la Ley N°27.604 de Manejo del Fuego y las prohibiciones de cambio de uso del suelo después de un incendio "representa una clara regresión en la protección de los ecosistemas, promoviendo actividades que se dicen productivas pero que pueden tener consecuencias ambientales devastadoras”, aseguran en un comunicado abogados ambientalistas que se suman al pedido de los científicos y científicas para que no se aprueben los cambios en las leyes mencionadas.
Según el Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de la provincia de Mendoza, la cobertura forestal de bosques de algarrobo en el Noreste de Mendoza es del 20%, en el centro Este de 26%, en Galería del Tunuyán del 46% mientras que en Pampa de la Varita es del 32%. Además de incumplir tratados internacionales y convenios ratificados por nuestro país "como OIT 169, el Acuerdo de Escazú, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y las recomendaciones formuladas por el IPBES y el IPCC", las leyes que pretenden modificarse, entre otras cosas, protegen estos bosques nativos de incendios como el que ahora deja cenizas en más de 1100 hectáreas en el Parque Nacional Los Alerces.
En Mendoza, "los bosques nativos brindan importantes contribuciones que permiten el desarrollo agrícola, la actividad ganadera y la vida en las ciudades", manifiesta el grupo de investigadores firmantes y aseguran que "protegen los suelos de la erosión y la desertificación, previenen la salinización de las aguas subterráneas, aseguran la provisión de agua, disminuyen el riesgo aluvional y constituyen el hogar de familias indígenas y pobladores rurales que obtienen recursos como leña y forraje. Además, contienen una gran diversidad de especies de plantas y animales que ayudan al control biológico, brindan recursos genéticos y tienen el potencial de constituirse en futuros productos como medicinas y alimentos".
Por esos motivos, advierten que las modificaciones de estas leyes que están propuestas en la ley ómnibus generan un inminente peligro ambiental contribuyendo a la destrucción de los bosques nativos y "conducen a desequilibrios que amenazan a las regiones productivas, como los animales que se convierten en perjudiciales por haber perdido sus hábitats y recursos del bosque (por ejemplo, carnívoros silvestres que atacan el ganado, aves silvestres que consumen frutos cultivados, etc.)". Asimismo, sostienen que "en el mundo, los bosques contribuyen a mitigar el cambio climático absorbiendo gases de efecto invernadero y liberando oxígeno" y por esas razones deben continuar siendo protegidos.