Inseguridad: otra ciudad busca incorporar las pistolas taser
La idea surgió a partir de una reunión del intendente con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Al igual que ocurre en Buenos Aires, la ciudad de Santa Fe comenzó a explorar la posibilidad de que el personal de la Guardia Seguridad Institucional (GSI) incorpore las pistolas taser. La iniciativa la trajo el intendente Juan Pablo Poletti luego de la reunión que mantuvo esta semana con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
"Queremos que la GSI tenga un papel activo, no queremos dejar expuesto al personal en un barrio complejo sin ninguna posibilidad de defensa o acción", explicó el intendente de Santa Fe entusiasmado con la posibilidad de ampliar las facultades del personal. La ministra Bullrich comprometió ayuda en capacitaciones si es que la ciudad decidiera avanzar en ese sentido.
Sin embargo, la idea no parece sencilla de implementar y avivó las críticas de sectores de la oposición. A diferencia de lo que ocurre en Buenos Aires, la ciudad de Santa Fe no cuenta con policía propia y la responsabilidad de garantizar la seguridad continúa siendo un atributo del Ejecutivo Provincial.
En el 2008 el Concejo de Santa Fe creó la GSI, con el objetivo de “contar con un cuerpo especializado, con actuación espacial, administrativa y operativa, que promueva mejores condiciones de seguridad por medio de la vigilancia, prevención, educación, control de edificios y espacios públicos” de la ciudad. No se trata de policías sino de agentes municipales que no pueden portar armas ni ejercer violencia física, sino actuar preventivamente.
En caso de querer avanzar con la idea, el intendente de la ciudad debería antes que nada, comenzar diálogos con los trabajadores municipales para ver las posibilidades reales de implementarlo. Se trata de personal que bajo ningún punto de vista fue formado para realizar tareas de seguridad sino de prevención.
En caso de contar con el visto bueno, posteriormente Santa Fe debería elaborar un proyecto con modificaciones a la ordenanza vigente y enviarlo al recinto del Concejo para ser discutido. Algunos inclusos hasta plantean la posibilidad de que deba intervenir la Legislatura para que se pueda materializar.
A nivel provincial, el ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, aseguró que no tienen "ningún tipo de prurito ideológico" con las pistolas taser y aclaró que “jurídicamente, no existe absolutamente ningún inconveniente” con la posibilidad de su uso aunque ató la decisión a una cuestión económica.
Consultada por la prensa, la presidenta del Concejo, Adriana Molina, no descartó la posibilidad de realizar modificaciones, pero advirtió que "sería importante tener una discusión y un debate del tipo legislativo provincial y, fundamentalmente, hacer una lectura más minuciosa de la ley provincial de Policía".
Por su parte, desde la oposición se mostraron sorprendidos por la posibilidad, pidieron dar un debate integral sobre la regulación, establecer protocolos y discutir realmente si genera impactos en la salud.
Cómo funcionan las pistolas taser
Las pistolas taser envían una descarga eléctrica de 400 volts durante cinco segundos a través de dardos que permiten inmovilizar a personas violentas o en estado de desequilibrio sin causarles daño permanente.
Estas armas de baja letalidad, además, graban toda la secuencia de uso -en imágenes y en audio-, por lo que pueden verificarse posteriormente las condiciones de tiro, indicaron las fuentes.