Vivir más y mejor, ¿es posible?

Mientras siguen buscando la píldora mágica de la "vida eterna" y los cirujanos estéticos arman cuerpos y caras de jóvenes en personas añosas, te cuento en ésta nota el verdadero secreto de la longevidad sana y natural manteniendo la vitalidad. En el mundo, en el último tiempo se ha decidido estudiar a poblaciones que llamaban la atención por su mayor expectativa de vida, alrededor de los 83-84 años, mientras que a nivel mundial es de 73 años; estos son un gran número de personas que viven alrededor de cien años de edad con vitalidad y salud; sin cáncer, alteraciones cardiovasculares, alzheimer ni fragilidad ósea.

A estos lugares del mundo se los llama "zonas azules" e incluyen a las siguientes regiones:

Icaria en Grecia, Cerdeña en Italia, Okinawa en Japón y Loma Linda en Estados Unidos. La Península de Nicoya como Zona Azul es la única de Iberoamérica y la más grande en extensión.

¿Qué tienen en común estás personas?

• Tienen un propósito de vida: un "ikigai", palabra japonesa que se usa para referirse a las "razones de ser" o más precisamente, las razones por las que nos levantamos cada mañana o mejor llamado "propósito de vida".
• Cultivan los vínculos familiares.
• Reducen el estrés interrumpiendo el ritmo normal de la rutina para dar paso a otras actividades que forman parte de los hábitos sociales comunes. Por ejemplo, dormir la siesta en las sociedades mediterráneas, rezar en el caso de los adventistas, celebrar la ceremonia del té para las mujeres en Okinawa.
• Comen sin llegar a la saciedad: solo hasta el 80% de nuestra capacidad en un momento dado.
• Tienen una dieta balanceada que incluye muchas verduras, legumbres y frutas.
• Consumen alcohol moderadamente.
• Hacen actividad física regular como parte de las actividades cotidianas, como por ejemplo, caminar.
• Tienen un fuerte sentido de comunidad y participan en círculos sociales que promueven comportamientos sanos.
• Forman parte de grupos que cultivan la fe o la religión.

Todo esto en un contexto que incluye, entre otras cosas, un clima amable, naturaleza prolífica, alimentos sanos, vida en comunidad, lejanía de los grandes centros urbanos. En nuestro país lo más parecido a estás zonas aunque no esté bien delimitado es la región
de cuyo. Como profesional de la salud y nutrición voy a resaltar el tipo de alimentación que tienen estas poblaciones, que varían poco según la región y principalmente se basan en el consumo de alimentos vegetales y frutas de la huerta propia producidos por ellos, lo que los convierte en productos orgánicos, consumo de legumbres, pescados, pocos lácteos, poca o nula carne roja, agua en grandes cantidades. Aceite de oliva y frutos secos con moderación y vino de forma reducida. Una alimentación similar a la que llamamos "Dieta Mediterránea".

Este grupo de personas además evita el exceso de comidas y mantiene actividad física moderada, combinando trabajo aeróbico (largas caminatas) con ejercicios de fuerza muscular. La actividad física que realizan es propia de su estilo de vida, la realizan sin darse cuenta y sin programación ya que son ejercicios propios de vivir en un lugar casi sin transporte y dedicándose al cultivo y cuidado de su huerta.

En nuestro país la expectativa de vida pasó a ser de 61 años en el año 2000 a 75-78 años en el 2023, siendo las principales causas de muerte: cardiovasculares, ACV y cáncer, estrechamente relacionadas a la alimentación y estilo de vida. El aumento en la expectativa de vida en los últimos 20 años se debe principalmente a avances tecnológicos, acceso a la salud y educación que a pesar de las crisis cíclicas económicas nos mantienen de abanderados en el mundo, aunque aún hay mucho camino por recorrer en tema de conciencia alimentaria, actividad física y reducción del estrés para seguir manteniendo o lo que es mejor, aumentando la expectativa de vida con mayor vitalidad y reduciendo gastos en salud.

* Silvana Franco, Lic. En Nutrición MN: 6309
Ig: silvanafranco.nutricion
Mail: lic.silvana.franco@gmail.com