Psicóloga se abrió un OnlyFans, revela cómo hacer dinero y cuánto se puede ganar
Ella "ama" su profesión, pero se animó a experimentar con algo nuevo que le generaba mucha curiosidad. Cuál es el principal mercado, qué es lo que más le piden y cuándo empieza a ser un negocio rentable. Todo lo que hay que saber.
El furor de OnlyFans, el servicio para crear contenidos para adultos que se venden a lo largo y a lo ancho del planeta, es relativamente nuevo. Si bien la plataforma se lanzó en 2016, en el último tiempo miles de personas – en su mayoría mujeres - comenzaron a interesarse en utilizar el servicio y así lograr unos pesos (o en este caso, dólares) extra.
Pero, ¿es tan fácil? La realidad es que, como todo, cuesta. No es nada de soplar y hacer botellas, todo lo contrario. Quienes logran monetizarlo – y no hablamos de gente famosa, sino de personas “comunes”, que buscan aumentar sus ingresos – pueden lograr entre 3.000 y 4.000 dólares por mes. Pero el camino no es sencillo.
No se trata de subir fotos “beboteando”, sino de un trabajo mucho más complejo y demandante, por lo menos para quienes de verdad lo ven como un negocio y apuntan a vivir de eso o, al menos, obtener un ingreso fijo.
Jennifer es psicóloga; no es su nombre de verdad, claramente, pero – a pesar de estar en el “rubro” -, prefiere mantener su identidad bajo reserva, justamente por su profesión.
¿Y cómo hace para compartir contenidos “subidos de tono” sin revelar su identidad? En una entrevista con MDZ contó esto y todo lo que hay que saber sobre el fenómeno OF.
“Mi curiosidad para entrar en esta plataforma empezó en el verano de 2022 mientras tenía conversaciones con unos amigos y salió el tema de que te podían pagar por fotos de pies. Siempre empiezan así las conversaciones y después van un poco más allá y te ponés a investigar y hace un poco más de un año no había tanta información sobre cómo acceder y crear contenido en la plataforma, por lo que recurrí a una chica que sabía que estaba en el rubro, ella me guió por audios de WhatsApp. Me dijo que me saque el pudor, que lo más probable es que se viralice, que lo que más convenía es hacer streaming. Me asustó un poco por el hecho de que se pudiera viralizar. En ese momento trabajaba en una institución muy machista, me dio miedo y me eché para atrás. Pero mi curiosidad estaba instalada. Lo dejé como proyecto”, comienza relatando Jennifer, que se dedica gran parte del día a su profesión y tiene una cargada agenda de pacientes.
“Con el tiempo fui investigando un poco más. Durante el año vi videos de chicas que empezaban a ganar en esta plataforma y a fin de año, en época de vacaciones, compré una guía sistematizada a una chica que vende cursos”, contó.
“Ahí empecé a estudiar, hay que interiorizarse bastante sobre los pasos a seguir para abrir la cuenta. Me incorporé al grupo de WhatsApp y empecé de a poquito. Yo tenía la disponibilidad porque estaba de vacaciones y me podía dedicar de lleno a esto; cuando empezás, tenés que tener energía y tiempo porque lleva mucho entenderlo y ponerlo en práctica. Aproveché esos meses para meterme y trabajar la cuenta porque no tenía tantos pacientes”, detalló.
Jennifer tuvo que estudiar antes de abrir la cuenta y, de a poco, fue subiendo fotos; primero sin mostrar la cara aunque después se fue “soltando”.
“En mi vida había sacado fotos explícitas porque uno tiene mambos con su cuerpo, pero me fui animando, haciendo fotos y videos mostrando cosas naturales, que todo el mundo hace”, indicó.
“Estructuré todo el contenido y empecé a vender. Lo explícito se vende por mensaje privado y hay que chatear, hay que estar tipo call center conectado la mayor cantidad de horas posibles y, por más que estés en tu casa, demanda mucho tiempo porque lo que buscan los que entran a la plataforma es chicas reales para satisfacer sus necesidades”, agregó.
Jennifer empezó a vender haciendo texting y, en un mes, pudo recaudar 400 dólares (siempre es el cambio al blue, un poco menos): “Tuve la suerte de que en la publicidad me encontraban por una plataforma que se llama Onlyfinder y me llegaban muchos fans”.
“Las que trabajamos en OF Argentina no vendemos en Argentina porque se viraliza o no suelen pagar por contenido”, aclaró. “No puedo tener cafecito por mi profesión. Only te permite bloquear tu país y que cualquier persona que entre desde Argentina no pueda acceder a tu perfil. Vos elegís los países donde querés ser más visible”.
Vender contenido explícito
“Al principio me costó familiarizarme con la idea de vender contenido explícito porque uno piensa que con bebotear en Instagram de manera censurada vas a poder hacer lo mismo y te van a pagar por ser carilinda o tener un buen cuerpo y no es así”, aclaró Jennifer a MDZ.
“Buscan algo más, lo gratis queda en la plataforma abierto como un ‘catálogo’. Y uno piensa, si hago esto ‘gratis’ para los seguidores de Instagram o TikTok, ¿por qué no hacerlo para los extranjeros y que paguen en dólares para ver un poco más?”, planteó.
“Hay un método para no ser famosa y captar clientes publicitándose con otras chicas, que se llama SFS. Hay términos muy específicos que aprendés cuando experimentás la plataforma. Al principio me parecía rara la idea de que pudiera mandarle una foto semi explícita a otra chica y que otro pudiera manejar mi contenido, pero con el tiempo te das cuenta que las chicas que trabajamos en OF tenemos una especie de manejo ético de la confidencialidad en cuanto a mostrar o no contenido de la otra, siempre tiene que ser con su consentimiento”, explicó.
Para Jennifer, “el grupo de WhatsApp fue fundamental, fue por lo que valió la pena pagar el curso. Se va armando una comunidad de trabajo donde todas nos apoyamos mutuamente en publicarnos y darnos like, que eso suma”.
“Hay dos partes difíciles: el tema de conseguir clientes y el de pasar el dinero a la Argentina, es un sistema que en algún momento puede fallar, hay que ser muy cuidadoso con eso”, analizó.
Y aclaró: “Todos los que estamos en esta comunidad lo tomamos como un trabajo serio”.
No es tan fácil como muchos piensan
“Me fui estancando porque en Onlyfinder solo se encontraban los perfiles nuevos y el mío se empezó a estacar, entonces comencé a hacer publicidad con otras modelos o ‘creadoras’ y empecé a tener que laburar más, porque había que hacer el trabajo fino, que lleva tiempo”, adelantó Jennifer.
“Hay dos tipos de página, la free y la paga. Como tuve buenos resultados dije, la voy a pasar a paga. Hay varias metodologías para trabajar, vi otra mirada que fue esta. Hice otro curso y me metí en un grupo de Telegram donde se manejan con otras lógicas: un suscriptor paga pero el contenido en el muro no es tan explícito, son clientes de mayor poder adquisitivo y con alcance mundial”, explicó.
Otra vez, a estudiar: “Hice el curso de la cuenta paga y ahí empecé a ver la plataforma de otra manera y me abrí dos cuentas, una gratuita y una paga. De las dos empecé a sacar distinta información. Me volví a estancar por falta de tiempo, falta de dedicación”.
“Yo amo mi trabajo, me contacté con otros profesionales que vi en los grupos, otra psicóloga y una abogada. Me sentí identificada con ellas porque, a pesar de tener un trabajo bien remunerado, estudios universitarios y trabajar de lo que quieren, también invierten en esta plataforma. Tenemos en común esto de no tener mambo con la sexualidad, poder expresarnos libremente y, si se puede sacar un mango para sumar a la economía, mejor. Hay chicas que se ponen un objetivo, cambiar el auto, tener su casa. En mi caso, lo que me ayudó es a pagarle la cuota del colegio más caro a mi hijo, me ayudó a poder acomodarme en esos meses de pocos pacientes. Esa es mi meta”, señaló.
“Es posible vivir de esto, pero hay que trabajar un montón”.
“Hay que aclarar que podés tener un golpe de suerte, pero mucha gente que empieza no llega ni a los 100 dólares. Hay que darle tiempo. Generalmente, un mínimo de 6 meses para tener un ingreso considerable. Es paciencia, mucho trabajo”, expresó.
Lo que más piden
“Es todo lo que está fuera de lo convencional. Lo que suele pasar es que suelen pedir fetiches: poses o cuestiones que van más allá de la genitalidad. Piden mucho la cosa personalizada, que les digas su nombre, que interactúes”, explicó Jennifer.
Y agregó que “piden mucha videollamada, por eso las que más ganas son las que están 24/7, eso es lo que buscan. Los 3 minutos de videollamada, en los que hacés lo que ellos te piden, cuestan mínimo 25 dólares. Son pocas las que tienen la amplia disponibilidad horaria para hacerlo”.
“Para nosotras es una ventaja, no solo porque se cobra un poco más, sino que se utilizan aplicaciones para que ese contenido no se pueda reproducir: no se puede hacer screenshot ni se puede grabar porque la aplicación te avisa, corrés menos riesgo de que el material se viralice”, añadió.
Mercado principal
“El mercado principal es de mujeres, porque la mayoría de los clientes son hombres - que pueden estar solos o no - que buscan mujeres. El mercado homosexual no es el más solicitado porque otras orientaciones que no son la heterosexual generalmente son un poco más libres con la sexualidad y la expresan más”, señaló Jennifer durante la entrevista.
“La mayoría busca una compañía o alguien que les preste atención solamente a ellos, por eso hay que mostrarse lo más disponible posible”.
Reacciones del entorno
“Hay muchas amigas que saben al respecto, muchas de ellas fueron las que me alentaron a hacerlo. Muchas me apoyan incondicionalmente en mis decisiones, pero algunas tuvieron actitudes reticentes a través del lenguaje corporal, me di cuenta que no era de su agrado que le toque el tema, así que con ellas no lo hablo”, contó Jennifer sobre las distintas reacciones de su entorno al enterarse de su nuevo trabajo.
“Mi familia en general no sabe, pero tampoco tendría problema en que lo sepan. El papá de mi hijo sí lo sabe y es muy comprensivo”, agregó.
“Lo que les digo es que ahora parece súper raro desde el punto de vista moral, pero con el tiempo va a ser súper normal. No hace falta ser una ultra famosa vedette para generar dinero a través de la venta de un perfil erótico o de desplegar o expresar cierta sensualidad, siempre fui de pensar de que si lo hacen famosas, por qué no lo puede hacer alguien que no es una figura pública si las redes sociales vinieron a democratizar todo. El rubro de la expresión de la sexualidad es un segmento más en la generación de contenidos”, detalló.
Y cerró: “Yo siempre digo, no vendo mi cuerpo, vendo la imagen de mi cuerpo”.
Otros datos
- OF se queda con el 20%;
-Saber mucho inglés también ayuda (hay nicho en países de esta habla, como Estados Unidos o Canadá);
-Hay muchas que usan la de “ay, me voy a tomar un café, ¿me lo pagás?”, es también una estrategia;
- Hay una regla para contenidos de parejas: si querés filmar con alguien tenés que sí o sí mandar los documentos y un consentimiento, no podés subir fotos y videos con otras personas sin que estén registrados en el Only con el documento de identidad.
Análisis filopsicológico del fenómeno OF (por una psicóloga que se animó a vivirlo)
La canción "Human Nature" de Madonna me identifica mucho cómo pienso respecto a la libertad de expresión sexual y de vivirla sin tabúes.
Me di cuenta y pude pensar más allá, viviendo esta experiencia, que lo que genera es que uno entra por curiosidad, uno piensa que te van a pagar por subir fotitos y no es así, para nada. A medida que entrás te das cuenta que es mucho más difícil de lo que se piensa, a menos que tengas un cuerpazo hegemónico, carilinda, juventud, un montón de circunstancias que facilitan que puedas hacer el dinero un poco más rápido. Pero en realidad, para el denominador común de la gente tipo es más difícil porque hay que hacer una carrera de marketing prácticamente para darse cuenta de lo difícil que es.
Cuando entrás, activa algo que los neurocientíficos llaman “circuito de expectativa-recompensa”, donde se liberan muchas cantidades de dopamina, es similar a la ludopatía.
Depositás tiempo, ganas, expectativa, capital, teniendo fe que va a volver multiplicado y te vas a llenar de plata. En el interludio entre la expectativa y la recompensa se libera mucha dopamina en el cerebro, estás como alerta, expectante, de que entre un suscriptor que le guste mucho tu contenido y te entregue mucho dinero. Puede pasar, sí. Puede pasar, no.
En mi caso, de casi 100 seguidores reales, uno solamente me compra siempre. Tenés que tener muchos seguidores para que uno se interese en vos.
Saber que está la posibilidad es lo que nos llama a todas las creadoras de OF a hacerlo. Muchas llegamos hasta acá por eso.
El circuito genera que muchos se envicien con esto porque es como estar buscando todo el tiempo la posibilidad de “pegarla”, de tener éxito. Siento que cada publicidad es una nueva oportunidad, es una fichita que meto en una máquina que en algún momento puede llegar a generar bastante dinero
Hay chicas como muy afligidas porque no les sale y están mal de plata y no lo pueden hacer rápido porque esto lleva tiempo. Llegar al objetivo no es tan fácil.
Generalmente las chicas que tienen mayor éxito, alcance o que ganan un promedio de entre 3 mil y 4mil dólares por mes, tienen parejas, novios, compañeros que se encargan de la parte más tediosa que es manejar las redes, responder los mensajes o hacer las publicidades. Se hace como una especie de sociedad, hasta pueden sacarle ellos mismos las fotos. Es más fácil, porque es un trabajo muy demandante para hacerlo sola, no podés con todo.