Vacaciones en la costa: esperan récord de turistas pero ya no hay precios de referencia
"Mar del Plata no es una isla; vive los mismos fenómenos que la Argentina", reconoció el presidente del Ente de Turismo y Cultura local, Bernardo Martín, en diálogo con MDZ.
Las localidades costeras esperan recibir un aluvión de turistas, los de siempre y aquellos que postergaron sus viajes al exterior ante la inestabilidad cambiaria, pero referentes turísticos aseguran que todo lo que habían anunciado hasta diciembre puede cambiar de forma repentina y jaquearon las vacaciones de millones de argentinos.
El precio de la paella, de la carpa, del departamento o habitación de hotel, del cine, de los teatros, hasta de los combustibles, todo quedó pendiendo de un hilo tras el traspaso presidencial y la expectativa por el paquete económico que desplegará el Presidente Javier Milei.
"Mar del Plata no es una isla; vive los mismos fenómenos que la Argentina. Esperamos que al país le vaya bien", reconoció el presidente del Ente de Turismo y Cultura local (Emtur), Bernardo Martín, en diálogo con MDZ, quien mira la temporada de verano con cautela pero elogió que la ciudad haya recibido 120 mil personas el fin de semana largo, con un porcentaje de reservas entre el 65 y 70%. "Nos visitó menos gente que el año pasado, pero ahí tuvimos cuatro días de receso, ahora uno menos", agregó.
Entre lo que va de los últimos doce meses, la ciudad lleva acumulada la visita de 8 millones de personas y si crece al menos en 600 mil superará su récord histórico. Esperan hacerlo muy pronto.
"La Feliz", que en febrero cumplirá su 150º aniversario, se encamina a un sinfín de festejos "puramente descentralizados", admiten distintas fuentes de la órbita pública y privada, que esperan que se viva por lo menos una semana de celebraciones. En tanto, la crisis económica avanza como una nube amenazante por las playas que se reacondicionaron en los últimos meses para ganar metros de espacio público, tras el Enduro del invierno, y que se inscribieron en un plan de accesibilidad con tres nuevas rampas que conectan el paseo costero con la arena mojada.
"No sabemos ni cuánto va a estar el choclo en la playa", reconoce un verdulero de la zona céntrica, que ya vio en la playa los primeros precios de referencia; el licuado cuesta entre $1.200 y $1.500, la botella de agua chica 800, la grande mil, y la media docena de churros o berlinesas $2.500.
El titular del Emtur espera "que salga todo bien", para no perder la conquista de "la ciudad más elegida por los argentinos".
Los empresarios que habían notado con preocupación cómo bajó en las últimas temporadas el gasto en regalos, creen que con el inminente aniversario podría existir un repunte de aquellos que quieran llevarse inscripto el número 150 en diversos productos. La empresa Cabrales ya distribuyó en cafeterías sobrecitos de azúcar con la típica postal marplatense y una leyenda por su aniversario, una empresa cervecera está preparando sus latas aniversario, al igual que harán medidas similares otros productos emblemáticos de la ciudad.
El teatro también busca reimpulsar la promoción de la ciudad y habrá funciones especiales, noches con entradas gratuitas -previo a una jornada multitudinaria de entrega de entradas en un estadio-,y muchas actividades al aire libre. Para aquellos que quieran hacer un plan austero, "también sobrarán los planes, como las visitas a museos y sitios culturales, todos gratuitos", describió Martín.
El sector hotelero ya comenzó a reforzar la contratación de personal pero transita una odisea a la hora de fijar precios, con la incertidumbre, por ejemplo, de la continuidad del Programa Previaje en la gestión del líder de La Libertad Avanza (LLA). Los hoteles de cinco estrellas reciben llamados a diario para pagar por anticipado habitaciones de mediados de enero o febrero, y les indican a sus clientes que "por este momento" van a cobrar el total a 48 horas del ingreso.
Los anuncios de devaluación y otras medidas de ajuste aniquilaron por ejemplo las cuotas sin interés en cadenas hoteleras. En algunos casos se consiguen 3 cuotas sin interés con recargo del 11,5% y 6 con el 21%, respectivamente.
Para Navidad y Año Nuevo las reservas crecen en todas las categorías, con una preferencia para terminar 2023 y comenzar el año próximo frente al mar. Con el crecimiento de la demanda, en algunos mostradores piden un mínimo de tres o cuatro noches para esas fechas.
En la gastronomía las dudas se reflejan en el vértigo de mandar a imprimir nuevas cartas y menúes. El empresario gastronómico Hernán Szkrohal, dueño de locales en la transcurrida calle Belgrano, se mostró esperanzado por "los resultados de los últimos fines de semana largo", donde hubo un movimiento exponencial en el centro y la costa -por los días soleados- pero consideró que "es muy prematuro saber lo que pueda pasar en el verano porque todo el mundo está pendiente de los precios y hay rumores de todo tipo sobre el aumento de alimentos".
"Habrá que esperar a ver qué pasa en los próximos días para ver cómo va a decantar el porcentaje de reservas, tanto en la hotelería como en la que la gente que va a llegar en la ciudad y opta por otro tipo de alojamiento. Estamos preparados en Mar del Plata como para ofrecer una muy buena propuesta de turismo pero tuvimos en noviembre un aumento del 45% en promedio en todos los distribuidores que no se pudo volcar a la carta porque hubiese generado recesión en las ventas", manifestó el referente, también integrante de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica (AEHG), a este medio. En sintonía, auguró que "en estos meses no se precipite la inflación para acompañar a una temporada muy buena".
Basta con ver la fórmula de costos de un pocillo de café para identificar la inestabilidad que atraviesa el sector. Un encargado de barra recuerda que "históricamente lo que incidía la mercadería en tu estructura de costos era el 30% y hoy en el rubro de la cafetería o pastelería incide 15 puntos más, en un promedio de 45% de costo de lo que es el precio de carta".
"A veces para no trasladar el aumento al público terminas resignando rentabilidad. Se hace un cuello de botella donde los negocios pasan a tener muy poca rentabilidad o nula. El café aumentó en el mes de noviembre un 45% en la distribución y la mayoría trasladó apenas un 15%. Se busca hacer magia para poder seguir siendo competitivo y seguir laburando pero se complica cada vez más", dijo, acongojado, el comerciante.
Otra duda es ver cómo podrían influir las quitas en el subsidio de transporte. En Mar del Plata viajar en colectivo cuesta $ 297,30 en su tarifa plana desde la semana pasada y los taxistas ya reclamaron nuevos aumentos, en lo que se avizora como una nueva guerra contra las aplicaciones como UBER y Cabify.