El Consejo Federal de Medio Ambiente apoyó a los guardaparques procesados por la muerte de dos niños

El Consejo Federal de Medio Ambiente expresó su apoyo a los cuatro guardaparques que están enfrentando un juicio penal desde el lunes por un hecho ocurrido en enero de 2016 en el complejo Lolen del Parque Nacional Lanin, cuando la caída de un árbol como consecuencia de los fuertes vientos, provocó la muerte de dos menores de edad. 

Mediante un escrito firmado por funcionarios de todas las provincias, el COFEMA expresó su "preocupación" y brindó su "fuerte apoyo" ante la posibilidad de que los trabajadores de la Administración de Parques Nacionales sean responsabilizados penalmente "por las consecuencias imprevisibles de los sucesos naturales".

Mediante el comunicado, señalaron que la existencia de cada parque nacional, tiene por fin "la conservación y preservación de la salud del ambiente y la habitabilidad de nuestro planeta".

"La visita y disfrute pleno de estas áreas protegidas son de carácter inminentemente agreste. De esta manera la preservación de los procesos naturales conlleva riesgo para las personas que transitan un área protegida", destacaron en el escrito. Además, indicaron que desde la Administración de Parques Nacionales se busca "reducir al máximo posible esos posibles riesgos e informar a los visitantes de los mismos, dentro de un marco de razonabilidad".

Es por esto que indicaron que, "pretender establecer con certeza la probabilidad de un evento riesgoso... implicaría una expectativa completamente excesiva".

"El dictado de una sentencia que responsabilice a los trabajadores de esa APN por los hechos naturales que pudiesen ocurrir en nuestros Parques Nacionales, como así también en todas las áreas protegidas a nivel Nacional, Provincial y /o Municipal, sería completamente injusto, pero además atentaría directamente contra las políticas de conservación, de turismo, restringiría el desenvolvimiento de la actividad económica, como la conciencia ambiental que debe primar", manifestó el Cofema.

Por último, expresaron que, "a fin de que los Parques Nacionales no dejen de ser lugares que deban ser disfrutados por toda la sociedad, expresamos nuestro apoyo y acompañamiento, siendo que el principio rector de Cofema se traduce en lograr y generar políticas ambientales concretas".

La sentencia

Este jueves, el fiscal federal Miguel Palazzani solicitó tres años de prisión y cinco de inhabilitación para los cuatro guardaparques en el marco del juicio que se lleva adelante en Neuquén por la llamada "tragedia de Lolen", ocurrida en 2016, en un camping del Parque Nacional Lanín.

En la tarde del 1 de enero de 2016, durante un día con fuertes ráfagas de viento, un roble pellín de unos 40 metros de altura ubicado dentro del camping Lolen se desplomó y mató a dos niños de 3 y 7 años, y lesionó de gravedad a su abuela y al padre.

Por ese hecho están siendo juzgados los guardaparques Matías Iván Encina, Diego Luis Lucca, Juan Ignacio Jones y María Mercedes Hileman, junto con los prestadores turísticos Milena Úrsula Cheuquepan y Juan Eduardo Delgado Abarzúa (a cargo de la concesión del camping cuando ocurrió la tragedia).

A todos ellos se los acusa de haber actuado de manera negligente al no advertir los riesgos que representaba el árbol, que estaba con sus raíces al descubierto.

El jueves, la Fiscalía pidió tres años de prisión que podría ser en suspenso y cinco años de inhabilitación a los cuatro trabajadores de la Administración de Parques Nacionales. En tanto, para los dos integrantes de la comunidad mapuche Curruhuinca -a cargo del camping- que también están imputados, solicitó la absolución. La sentencia se conocerá el próximo martes 7 de noviembre.

Los cuatro guardaparques están acusados por "homicidio culposo agravado por el número de víctimas, lesiones graves culposas agravadas por el número de víctimas, e incumplimiento de los deberes de funcionario público".