Clínicas en alerta tras la firma de paritarias para trabajadores de la sanidad

En el marco de una nueva apertura de paritarias dictada por el ministerio de Trabajo de la Nación, representantes de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS) y de la Unión Argentina de Salud (UAS) acordaron el martes pasado una serie de medidas que permitan contar con los recursos necesarios para afrontar las actualizaciones de los salarios de los trabajadores de Sanidad.

En ese sentido, el Gobierno nacional otorgará el beneficio para los establecimientos privados de salud llamado FESCAS flexibilizando los topes, con el equivalente a un salario mínimo y medio vital y móvil por empleado, con un tope de seis SMVyM. El cobro del FESCAS se hará efectivo en diciembre del corriente y en enero de 2024. Además, reiteró el compromiso de mantener el alivio fiscal vigente en la actualidad durante todo el año 2024.

Otra de las medidas acordadas es el aumento adicional para las cuotas de las empresas de medicina prepaga para el mes de enero. Según trascendió, el PAMI otorgará un aumento del 16% en noviembre y un 14% en diciembre, con anticipo financiero; y IOMA otorgará una suba del 15% en noviembre y 15% en diciembre.

Además, se estableció la prórroga, por un año más, de la Emergencia Sanitaria. Todo este paquete de medidas -que se irá plasmando en las distintas resoluciones administrativas durante los próximos días- destrabaron la firma de paritarias para los trabajadores de Sanidad en dos tramos que se harán efectivos con el cobro de los salarios en octubre y noviembre, con una revisión en enero de 2024.

Ante esta situación, sumado a la crisis que atraviesan sanatorios y clínicas por el aumento de los costos, la demora en el pago de las obras sociales y prepagas que va por detrás del índice de inflación, el presidente de la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de Cordoba (ACLISA, integrante de la FAS), Ignacio Escutti, expresó a MDZ que la situación se vuelve cada vez más compleja con el incremento salarial acordado para los trabajadores del sector.

"En los dos últimos meses del año, el aumento salarial será del orden del 67% de incremento, porque es un 17,5% más sobre la base de octubre y un 17,5% sobre la base de noviembre. De algún modo, si no contamos con un ATP o un subsidio de algún tipo por parte del Estado, se profundizará aún más la crisis por la que estamos atravesando. Hay que tener en cuenta que el 60% de los costos de las clínicas es en personal. Es decir, que al aumento de los materiales e insumos, ahora se suma el incremento en recursos humanos. Entonces la situación es muy compleja", aseveró Escutti.

El presidente de ACLISA dijo además que el sector privado de la salud viene siendo castigado en los últimos 20 años, en el que calculan que cerca del 75% de las clínicas privadas del interior cerraron por problemas económicos. Es en este sentido que señaló que se solicitará un ayuda al Estado para poder afrontar las dificultades económicas que golpean el sector.