Insólito operativo terminó con el secuestro de cinco litros de semen

Una gran sorpresa se llevaron los agentes especializados de la Dirección General dela Aduana apostados en la Terminal Dársena Fluvial Sud, Colonia Express, en las últimas horas, tras descubrir e cargamento que un ciudadano peruano intentaba ingresar al país desde Uruguay entre su equipaje.

El insólito hallazgo ocurrió cuando el buque proveniente de Colonia del Sacramento, Uruguay, atracó en el puerto. Cuando los pasajeros descendieron de la embarcación y se sometieron a las inspecciones de rutina que realiza el personal de la Aduana a través de un método del escáner, el cual no es intrusivo, detectaron un extraño recipiente térmico entre el equipaje del ciudadano peruano, consistente en tan solo dos mochilas.

En una de ellas, las imágenes del escáner revelaron un bulto extraño, lo que llevó a los inspectores del organismo a consultar qué contenida ese extraño recipiente. “No llevo nada, no tengo nada para declarar señores”, contestó el turista ante las preguntas
de los agentes.

Pero no conformes con la respuesta, los inspectores de la Aduana, le solicitaron que abra el equipaje y en ese momento descubrieron un recipiente térmico con una sustancia blanca en su interior. Al consultarle sobre el liquido en el recipiente, primero se puso nervioso y terminó diciendo que llevaba semen canino.

Finalmente, los agentes corroboraron que llevaba cinco litros de esa sustancia en el interior del contenedor que es usado para transportar este tipo de elementos líquidos, debido a que estaba refrigerado.

En el marco del artículo 979 del Código Aduanero, el agente de inspección terminó secuestrando el semen ya que se trata de un producto que no es admitido por el régimen de equipaje. Ocurre que la exportación de material reproductivo animal requiere la presentación del Certificado Veterinario Internacional (CVI), el cual es expedido por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).