Las historias de solidaridad que dejó el combate contra los incendios en Córdoba
La intensa jornada y la noche de vigilia por el avance del fuego en las sierras cordobesas, dejó a su paso historias de solidaridad entre los vecinos afectados. Te contamos algunas de ellas.
Abrazos, mucha emoción y un agradecimiento inconmensurable. La escena se repite entre los vecinos que ayer martes, en las serranías cordobesas, vivieron momentos de mucha tensión por el avance del fuego sobre sus viviendas en las localidades de Villa Carlos Paz, Icho Cruz y Cabalango.
El día después de los incendios en las sierras de Córdoba muestran un panorama desolado, de monte nativo oscurecidos por las cenizas y los rastros que dejó las pérdidas de animales, mascotas perdidas y algunas (pocas, por fortuna) viviendas arrasadas por las llamas.
Las tristes imágenes del día después están plagadas además de anécdotas de la organización solidaria de los vecinos que hacían una “cadena humana” para pasar de mano en mano baldes de agua que extraían de las piletas para extinguir el fuego que consumía los pastizales y rodeaban los barrios.
Estela es una vecina de Cabalango. Anoche debió dejar su vivienda por el avance de las llamas y la orden de evacuación que dio la jefa comunal, como la mayoría de los 800 habitantes de esa localidad.
Esta mañana regresó a su hogar conmovida porque tuvo que dejar a su mascota, su chancha llamada “Puchi” atada en el patio de su casa. Pero su vecino la vio y la resguardó del fuego. Estela se abraza con quien salvó a “Puchi” y que trabaja en el área de Defensa Civil. En diálogo con Radio Mitre Córdoba, se la escucha emocionada cuando agradece además a los bomberos que evitaron que su vivienda fuese arrasada por los incendios.
A pocos metros se da otra situación muy particular. Tres bomberos provenientes de la localidad de Los Cóndores, que llegaron con una dotación de su cuartel para colaborar con el voraz incendio en Cabalango, disfrutan del desayuno que les prepara Miguel Trigo Conte.
La escena es registrada por el periodista Andy Ferreyra que en su Twitter detalla: "Son Javier Fernández, jefe del cuartel de bomberos de la localidad cordobesa de Los Cóndores; Juan Pablo Morales, bombero voluntario; y Lucas Pacho, bombero voluntario".
Miguel los invitó a pasar la noche en su casa para que descansen y les agradeció la tarea denodada de arriesgar sus vidas para cuidar su casa y la de otros vecinos, preparándoles el desayuno y compartiendo la mesa con él y su familia.
Marcelo se abraza con un bombero en la puerta de su casa, ubicada al límite entre Villa Carlos Paz y San Antonio de Arredondo. El vecino no quería abandonar su vivienda ante el avance del fuego pero se vio obligado a hacerlo porque estaba en riesgo la vida de su familia.
“Muchas gracias de todo corazón, por el trabajo que hacen. Este es mi lugar en el mundo. No me quería ir de mi casa. La hice con mucho esfuerzo y hace un año y medio que vivimos acá. Nunca pensamos que pasara esto. Perdón, pero siento mucha emoción", cuenta el hombre entre lágrimas.
Otra de las vecinas cuenta que los momentos de desesperación que vivió cuando el fuego avanzó fuera de control hacia su casa. “Estaba sola, mi familia no alcanzó a llegar y en un momento tenía a más de 150 personas que rodeaban mi casa y la de mi vecino, y nos ayudaron con todo, hasta con los animales. La gente llegaba con un balde, con una olla o con una botella de agua para apagar las llamas", relató emocionada a Canal El Doce.
"Esto estaba lleno de animales, era todo naturaleza y de repente vi gente que no conocía a ayudarnos. Infinitas gracias a todos porque no solo salvaron mi casa, sino que ayudaron a que esto se frene un poco", contó.