3 años sin Fernando

Báez Sosa: Graciela y Silvino, el antes y el después

Hace semanas que toda la sociedad escucha y ve cómo le quitaron la vida a Fernando Báez Sosa. Vemos la cara de sus asesinos y la de (¿qué palabra puedo usar?) desolación, dolor, desgarro de Graciela y Silvino. Viviam Perrone, mamá de Kevin Sedano e integrante de "Madres del dolor" reflexiona en MDZ.

Viviam Perrone miércoles, 18 de enero de 2023 · 15:23 hs
Báez Sosa: Graciela y Silvino, el antes y el después

Podemos hablar de los acusados, asesinos, verdugos pero, ¿cómo los llamaban antes? ¿Cómo eran ellos en sus casas, en la escuela, en el club, en el barrio? ¿La noche que mataron a Fernando Báez Sosa fue una excepción? No. Nuevamente tenemos que decir, como en el caso de Lucio Dupuy y tantos otros, que la justicia falló. Eran violentos, agresivos. Algunos de ellos ya habían agredido a un joven que terminó hospitalizado y ninguno fue detenido por ese hecho. Nadie tuvo que cumplir con alguna tarea social para aprender que la violencia lleva a la muerte. 

Es verdad que los padres son los que dan las bases en una educación en valores pero una vez que los hijos crecen y salen solos, necesitamos de un estado presente para acompañar esa educación. Hay gente que habla de “la mala junta.” Como padres debemos hablar con nuestros hijos una y otra vez y el Estado debe acompañar y ayudar a poner límites.  Si un joven terminó hospitalizado en Zarate debido a la violencia con la que actuaban estos futuros asesinos, se debería haber hecho todo lo posible para que aprendieran a no vivir y actuar así. Solo con un sistema judicial efectivo se puede sociabilizar.  

Una pregunta recurrente es ¿qué va pasar "después" del juicio? Seguramente los imputados reciban condenas elevadas. Hay presión social, hay medios, hay acompañamiento del Estado. Lo preocupante es ¿qué va a pasar dentro de unos meses? Los imputados deben dar las gracias porque Fernando, con su muerte, les está dando la oportunidad de aprender lo que sus familias y el Estado no les supieron enseñar: Respeto, empatía, honradez, son algunos de los valores que ahora sí pueden hacer propios. Cuando hayan asumido su culpabilidad y a partir de esa aceptación modifiquen sus conductas, qué bueno sería verlos dar charlas a jóvenes para evitar la violencia mientras cumplen con su condena. Podrían explicar que hay otras maneras de pasarla bien sin “mamarse”, como dijeron ellos. Hay tanto que pueden hacer para devolverle a la sociedad un poco por todo el mal que generaron.

Lo más preocupante es el "después" para Silvino y Graciela. Un después con una cama vacía, un cuarto en silencio, amigos de Fernando que siguen con sus vidas, se reciben, tienen hijos. ¿Cómo enfrentar a ese "después"? ¿Seguirán en la lucha judicial cuando se comience hablar de beneficios, morigeración de penas? ¿O la justicia sanadora los dejará comenzar a vivir el duelo?

Es ahí cuando todos, aunque el caso ya no salga en los medios, debemos hacer propios los valores que la muerte de Fernando nos deja.

 *Viviam Perrone es profesora e integrante de Madres del Dolor.

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