Movimientos sociales exigen una reunión con el Gobierno y amenazan con un nuevo plan de lucha
Juan Zabaleta recibirá en persona o a través de alguien de su confianza a los dirigentes sociales que lideran grupos piqueteros, de reclamo, que llevan a cabo acampes, cortes y ponen en jaque la paz social últimamente.
Los representantes de diversos movimientos sociales serán recibidos después de las 13 cuando Eduardo Belliboni del Polo Obrero, Silvia Saravia de Barrios de Pie y Mónica Sullo de MDT Teresa Vive y otros dirigentes pasen la entrada de Desarrollo Social, el ministerio que supo administrar Daniel Arroyo hasta que fue reemplazado por el actual ministro, Juan Zabaleta.
"Vamos a plantearle al ministro y a reclamar por el incumplimiento de las entregas de alimentos a los comedores populares que aumentan la demanda al mismo tiempo que aumenta la inflación y más y más trabajadores bajan a la línea de pobreza y a la indigencia" dijo Belliboni a MDZ. Y añadió: “Por otro lado la situación se agrava y el Gobierno profundiza un ajuste que va a golpear a la educación, la salud, la producción y hasta los jardines de infantes como acaba de anunciar el dúo ajustador de Massa y Rubistein".
La situación es la soga que se estaba tensando semanas atrás y a partir de la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía habían prendido las luces de alerta. Tal es así que se habían unido miradas distintas, antagónicas en la Plaza de Mayo. Se habían encontrado militando las mismas exigencias en el Congreso y la Plaza de Mayo, grupos alineados con el Frente de Todos, como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), y los enfrentados con el oficialismo, como los grupos izquierdistas de la Unidad Piquetera. Con la exigencia de un ingreso de emergencia o Salario Básico Universal como denominador común habían hecho una alianza heterogénea que ya habían anticipado en asambleas barriales compartidas.
Juan Zabaleta no tendrá demasiado para ofrecer y es sabido que no puede afrontar el pedido esencial de llevar el salario mínimo vital y móvil a 111.000 pesos que es el reclamo del PO. Esa cifra surge del cálculo del valor de la canasta básica medida por el IPC del Indec. Según los movimientos sociales, siempre que la inflación se aumente o sostenga el Gobierno tiene que afrontar con aumentos mensuales que hagan que el poder adquisitivo de quienes cobran ese dinero, no caiga frente al aumento generalizado de precios.
La bronca principal de los opositores está planteada hoy entre Fernando "Chino" Navarro de Movimiento Evita y Juan Grabois, quien amenazó con derramar sangre en las calles y luego quedó en silencio tras las medidas de Sergio Massa ya anunciadas.
Juan Grabois es considerado por los opositores como no confiable, y desde el MTR y PO confirmaron el concepto a este medio: “todos sabemos que tiene un pacto con Cristina, eso no va a cambiar”, definieron.
En el caso de Navarro la situación no es mejor: teniendo una obligación por ser parte del Gobierno ya que conserva su cargo de secretario parlamentario, tiene que responder a exigencias que incluyen, por ejemplo, evitar las protestas. “Antes era un dirigente que reclamaba, ahora el movimiento es Evita, evita reclamar, evita marchar, evita reivindicar” ridiculizaron desde el PO a Navarro.