Medio Ambiente

Indignación y repudio desde Mendoza por la caza de cuatro pumas en Neuquén

Desde la Fundación mendocina Cullunche compartieron un video que se hizo viral en las últimas horas, donde se muestra a los ejemplares muertos después de ser cazados. Advierten que en esa provincia la caza de estos animales silvestres es ilegal. Piden la derogación de una ley de Río Negro.

Zulema Usach
Zulema Usach viernes, 15 de julio de 2022 · 21:30 hs
Indignación y repudio desde Mendoza por la caza de cuatro pumas en Neuquén
El puma es un felino que sufre de una caza indiscriminada en varias provincias argentinas. Foto: Archivo

Un video se hizo viral en las últimas horas y generó indignación por parte de las asociaciones que trabajan en pos de la conservación de la fauna silvestre y de cientos de personas a través de la red social Instagram. En la imagen, se puede visualizar que un grupo de hombres cargan uno a uno en sus espaldas a cuatro pumas que fueron asesinados por ellos en San Martín de Los Andes (Neuquén), donde la caza de ese felino autóctono está terminantemente prohibida.

Desde Mendoza, la Fundación Cullunche (entidad que trabaja en el provincia desde hace al menos tres décadas en pos de la protección de la fauna silvestre), hicieron público el repudio a esta acción y solicitaron que de manera urgente se logre hacer Justicia respecto de los responsables de este cruento hecho.

"Es un delito porque Neuquén no tiene habilitada la caza del puma. Sí pienso que cuando cazan en cantidad, los hacen pasar -a los cazadores- del otro lado de la frontera para que Río Negro les pague por puma muerto, donde lamentablemente todavía está permitida la caza de fauna silvestre. Es inconcebible que se muestren de este modo con cuatro pumas muertos, es un hecho absolutamente repudiable y que atenta gravemente al medio ambiente", detalló Jennifer Ibarra, titular de la entidad y aclaró que hasta el momento no descartan que estas personas sean pagadas posiblemente por Río Negro".

 

La presidenta de Cullunche detalló que una de las acciones más fuertes que se están solicitando desde las organizaciones que defienden el medio ambiente, tiene que ver con la derogación de una ley que data de 1958 y que habilita al Estado de Río Negro a destinar recursos para mitigar los posibles ataques de pumas a la población.

"Decláranse plagas en todo el territorio de la Provincia, a las siguientes especies de animales silvestres depredadoras de la ganadería: zorro gris, zorro colorado, puma o león americano y jabalí o chancho salvaje", versa en su primer artículo la normativa que está siendo puesta en discusión por asociaciones de todo el país y cuyos preceptos -considera Ibarra- están desactualizados, fuera de contexto y atentan de manera muy grave contra la conservación de la fauna autóctona. Según trascendió hasta el momento, los hombres involucrados en esta matanza, están siendo interrogados por las autoridades de Neuquén.

Especie protegida en Mendoza

La conservación del puma no reviste una importancia menor en un contexto donde las amenazas ambientales están a la orden del día. Ibarra detalló que este felino silvestre se caracteriza por ser "el segundo más largo después del yaguareté y forma parte de las diez especies de felinos que habitan en Argentina, de los cuales cinco están en Mendoza", explicó Ibarra y detalló que existe en el territorio nacional más de una especie de puma y de allí radica justamente, la importancia de su preservación.

"No es lo mismo es lo mismo el puma de la Patagonia, que el que habita la región de Cuyo o la selva misionera", aclaró la médica veterinaria y puntualizó que el puma es un felino de hábitos solitarios y que una vez al año se produce la época de apareamiento. "La gestación dura tres meses y como mucho, nacen dos o tres cachorros por parto", destacó Ibarra.

La protección integral de los ecosistemas es otro aspecto que destacan desde la entidad que defiende y protege a la fauna silvestre. Ocurre que en el caso del puma, sus presas más habituales en estado natural son los pequeños mamíferos, como las vizcachas, los conejos o las liebres. "El problema es que cuando el humano altera el ecosistema, los pumas buscan ir a cazar a las zonas donde está el ganado y ahí es cuando se producen los conflictos", explica Ibarra. Detalla que el período máximo de vida de estos ejemplares no sobrepasan los doce años. 

La necesidad de preservar y cuidar a esta especie además, radica en que se trata de un felino necesario para lograr el justo equilibrio ambiental en los ecosistemas. En ese sentido, Ibarra aclaró que el puma hace las veces de "paraguas" debajo del cual se conservan otras especies. "Lamentablemente se trata de un animal que sufre de una persecución despiadada, sobre todo el provincias como Río Negro, Chubut y Santa Cruz. En La Pampa, de hecho, son usados como coto de caza y su carne es usada para fabricar escabeches", alertó la fundadora de Cullunche y aclaró que en Mendoza esta especie está protegida. 

 

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