A pesar de la inflación en Estados Unidos este producto mantiene su valor por una interesante razón

Estados Unidos está sufriendo una gran aumento de precios de alimentos que se refleja en las góndolas de todo el país. Sin embargo, el precio de un producto muy importante de consumo masivo no ha variado en la mayoría de los comercios. Se trata del pollo asado y la explicación es interesante.

A pesar que le pollo tuvo una suba del 16,4% anual, el pollo asado sigue costando U$4,99 en Costco (COST) y BJ's Wholesale Club (BJ). mientras que Meijer sigue vendiendo su pollo asado a U$5,99, mientras que Giant Eagle lo ha mantenido a U$6,99 y Publix a U$7,39.

Esta decisión de mantener el precio del pollo tiene una lógica ya que los estadounidenses valoran el pollo asado y es un alimento de alto consumo. Si este precio se mantiene, funciona como una demostración de que la inflación no está afectando gravemente al supermercado. 

Muchas veces las empresas están dispuestas a perder dinero con tal de seguir siendo competitivas entre ellas, a pesar de que los costos de producción suban cada vez más.

Según comenta la CNN, los ciudadanos del país saben exactamente cuánto cuesta su pollo asado, y notarán hasta el más mínimo aumento. Este producto se sitúa a sí mismo como uno que ayuda a establecer la percepción general de los consumidores sobre el valor de una tienda, junto con otros como el galón (litro en nuestro país) de leche o un maple de huevos. 

Según expertos, aumentar el precio del pollo asado, aunque sea unos centavos, podría tener consecuencias de gran alcance.

Bob Eddy, director general de la cadena BJ's, destacó esta estrategia: "Hemos seguido invirtiendo en nuestra propuesta de valor. Un buen ejemplo es nuestro emblemático pollo asado". También demostró que, aunque los costes de producción de BJ's para el pollo asado han aumentado, la empresa ha mantenido los precios firmes porque es "algo muy significativo para nuestros miembros".

La cadena Costco los mantiene a U$4,99 desde hace más de 10 años. La estrategia de Costco suma una arista más, ya que esta cadena coloca los pollos en la parte trasera de la tienda, con la esperanza de que los clientes compren artículos por impulso cuando pasen por delante de los palés de mercancías en su camino hacia los asadores.

Situación en Argentina

En Argentina, en los últimos meses se está viendo una gran caída en el consumo de algunos productos como la carne debido al aumento de precios. Por ejemplo, en el mes de abril, este producto clave de la canasta básica mostró alzas en promedio del 8%, es decir bastante por arriba de la inflación general que de por si ya fue elevada.

Según un relevamiento realizado por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), el último pico de consumo de carne vacuna se registró en 2009 cuando los argentinos comían alrededor de 70,3 por habitante por año. Actualmente, 13 años después el consumo cayó a unos impresionantes 22,6 kilos por habitante por año.

Esta disminución en el consumo se puede explicar también por la oferta de otro tipo de carnes, a precios más convenientes, como lo son el cerdo y el pollo, que fueron ganando terreno en las mesas aunque también vienen mostrando subas aceleradas en los últimos meses. Según el IPCVA, el precio del pollo fresco mostró alzas muy significativas, por ejemplo, en marzo se pudo ver un aumento del 15,1% con respecto a febrero.