Dama antigua: qué accesorios típicos usaban las mujeres en 1810

En 1810, el look de las mujeres decía mucho de la moda del momento pero también tenía ciertas resonancias políticas. En esta oportunidad, nos centramos en los accesorios que usaban las damas antiguas y compartimos las principales claves que hay que saber al respecto. No te pierdas los detalles.

Las mujeres en 1810: estos accesorios se usaban durante la Revolución de Mayo

En lo que es el actual territorio argentino, en los tiempos de la Revolución de Mayo y de la Independencia, y tanto para los hombres como para las mujeres, la forma de vestirse hablaba, ante todo, de las diferencias de clase. En otras palabras, la indumentaria dejaba ver con claridad quiénes pertenecían a las elites y quiénes era de los sectores más bajos.

También había una cuestión vinculada a las diferencias de género, es decir, a la de hombres y mujeres. Quien da algunas pautas al respecto es Rosana Leonardi, investigadora especializada en la historia del diseño de indumentaria.

En una entrevista, Leonardi dice, por ejemplo, que muchas veces las mujeres se vestían de hombres para que los demás no se dieran cuenta de quiénes eran y así poder acceder a los sitios que solo estaban destinados para estos.

Por ello, muchas veces se presentaban desprovistas de accesorios e instrumentos similares. Eso sí, cuando los usaban hacían uso de elementos destacados (la autora en cuestión menciona collares de perlas y “camafeos”).
 

Otros elementos propios de los looks femeninos en 1810

Leonardi destaca que, a pesar de los tiempos revolucionarios que se vivían en el Río de la Plata hacia comienzos del siglo XIX, muchas mujeres de entonces aún salían a las calles “con las cabezas tapadas”.

Las de posición más privilegiada, que tenían sus beneficios no por el hecho de ser mujeres sino por pertenecer a las clases dominantes, solían usar el pelo recogido mediante tiaras, a veces dejando que algún mechoncito se escapara por los costados.

Otros accesorios que usaban las mujeres en 1810 eran las mantillas andaluzas, las peinetas y los abanicos.

Por otra parte, y más allá de los elementos y accesorios propios de cada persona, otro factor que dejaba entrever con claridad las diferencias económicas era el de la calidad de las prendas.

Para finalizar, otra de las cuestiones clave que remarca Leonardi es que, para las clases dominantes, muchas de las nociones de moda y estética que se tomaban eran provenientes de Europa, sobre todo de España y, en menor parte, de Francia.

Luego de leer todo esto, ¿qué opinas acerca de estos datos históricos vinculados a la moda y a los accesorios que usaban las mujeres hace unos 200 años?