Las cinco rituales más usados para espantar lluvias y tormentas

Con un pronóstico de clima para la Nochebuena que no parece favorecer las cenas al aire libre ante la posibilidad de que se produzcan tormentas y lluvias de variada intensidad en más de la mitad del país no falta quienes se aferran a viejos rituales para "cortar la tormenta"

Muchos de ellos son hábitos y costumbres de generaciones anteriores, mientras que otros responden a cultos africanos o creencias populares que fueron pasando de generación en generación.

La cruz de sal

Es quizás la más común y la que no pierde vigencia. Consiste en hacer una cruz con sal gruesa en la tierra y clavarle un cuchillo en el medio.

El hacha

Si la cruz de sal no fuera suficiente se puede recurrir al hacha para cortar la tormenta haciendo ademanes en dirección a los nubarrones. Luego se la deja clavada en un trozo de madera.

Ristra de ajos

Es una tradición muy utilizada en las zonas rurales. La ristra de ajos se cuelga de algún clavo o del tirante del techo para amortiguar el temporal y fundamentalmente para ahuyentar la tormenta “eléctrica”.

Huevo estrellado o enterrado

Para muchos es uno de los más eficaces para alejar las lluvias. Consiste simplemente en arrojar un huevo contra una pared envuelto en un papel con la siguiente leyenda: "Santa Clara, que no llueva hoy, el huevo se rompe y la lluvia para". Hay otra versión que implica solamente enterrar en el jardín o en una maceta un huevo, mirar al cielo y pedirle a Santa Clara que aleje la lluvia.

Paraguas pata para arriba

Es el menos utilizado pero hay quienes aseguran haber tenido éxito. Solo hay que poner en el suelo un paraguas al revés y dejarlo por varias horas.