La Iglesia pide "prudencia" ante fenómeno de virgen que llora sangre

La comunidad santiagueña de Vinará, una pequeña localidad ubicada a 14 kilómetros de las Termas de Río Hondo, sigue conmocionada frente al fenómeno de una imagen de yeso de la Virgen de la Inmaculada Concepción que presuntamente exhuda lágrimas de sangre y a quien, además, le atribuyen desde hace varios meses una serie de milagros.

Frente a ese contexto, el obispo de Santiago, Vicente Bokalic, dijo que "se trata de algo muy serio como para emitir opiniones ligeras" y pidió tomar el tema "con pinzas" y "mucha prudencia". “Vamos a ver cómo evolucionan las cosas y en su momento enviaré gente para que haga un estudio serio para ver de qué se trata", señaló el prelado.

Sobre un presunto milagro obrado por la Virgen, monseñor Bokalic sostuvo que cuando se cuenta de estos fenómenos "mucha gente comienza a hablar de milagros", pero que se trata de algo muy serio como para emitir opiniones ligeras.

"Por lo que he visto, la cosa está muy dividida también en esa comunidad. Estos fenómenos hay que tomarlos con mucha serenidad, con sabiduría y mucha prudencia. No podemos emitir juicios ligeros. Este sería un fenómeno muy especial, y tenemos que ir viendo despacio cómo se dan los acontecimientos", añadió en declaraciones a la agencia AICA.

Según cuentan los pobladores, la imagen, hecha de yeso macizo, que mide alrededor de 1,20 m, había sido abandonada en el depósito de la parroquia de Las Termas de Río Hondo junto a otros objetos religiosos. Siempre de acuerdo con el relato de los lugareños, hace más de 50 años la imagen tuvo varios episodios que llamaron la atención y la convirtieron en un objeto de devoción.

Incluso, entre los fieles devotos, hay quienes aseguran que la intercesión de la Virgen permitió una serie de milagros; entre ellos la cura de un cáncer de retina de una niña y el embarazo de un matrimonio que no podía tener hijos.