Comió 32 piezas de sushi, terminó internada en el hospital y se hizo viral

Fue a un tenedor libre en Mountain View, California, pagó 50 dólares para comer todo el sushi libre que quisiera y pasó lo que nunca imaginó que sucedería, terminó internada en el hospital. Danielle Shapiro comió 32 piezas y tuvo que acudir a urgencias, registró cada escena en su cuenta de TikTok y rápidamente se volvió viral.

En el inicio del video viral, que ya cuenta con más de 1.300.000 likes y ha sido compartido más de 27.000 veces, se puede ver a la joven de 24 años en la guardia del hospital y la imagen está acompañada de un texto que dice: “Sí, esa soy yo. Probablemente te preguntas cómo terminé en esta situación” y luego suma imágenes de su alocada noche comiendo sushi sin parar.

Danielle filmó cada una de las veces que ingirió los 32 rolls. Además de la sopa de miso, cuatro gyozas y dos chiles jalapeños. 

La joven cenó con una amiga y cuenta que “ambas estábamos ansiosas por la experiencia de ’todo lo que puedas comer de sushi’. Nuestra cena duró unas dos horas porque estábamos tan llenas que tuvimos que tomar varios descansos”, según publicó People.

Toda la experiencia fue un reto que llevaron adelante las mujeres. Ambas comieron una gran cantidad de piezas y fueron registrando cada momento de la cena, conforme transcurría la parte final del video, se vio cómo a la mujer le costaba cada vez más ingerir tal cantidad de comida.

Pero ella pensaba que no se podía perder la oportunidad de comer la cantidad de rolls que deseara sin límite alguno, como si fuera poco, el video terminó con la imagen de Danielle envolviendo en una servilleta una pieza de sushi “para llevar”.

“Mi estómago se sentía muy firme por todo el sushi y probablemente por el arroz que se expandió dentro de él”, reconoció la joven que tuvo que esperar con su amiga más de 30 minutos en el auto porque la inflamación abdominal no le permitía prácticamente respirar.

Las consecuencias de la cena que Danielle prefiere olvidar no fueron inmediatas. La chica se fue a dormir a la casa de su novio y despertó a la madrugada “con el peor dolor de estómago”. Era tanto el dolor que sentía, sumado a la molestia para respirar que su novio y abuela tuvieron que trasladarla hasta el hospital por los síntomas que tenía, allí quedó internada por reflujo gastroesofágico.

Pero todo lo vivido para Danielle fue un aprendizaje:  "Lo que sí he aprendido es que la próxima vez tengo que escuchar a mi cuerpo y tomarme las cosas con más calma".