Bulimia nerviosa: qué es y cómo ayudar a quien la sufre

La bulimia nerviosa, comúnmente conocida como bulimia, es un trastorno alimenticio caracterizado por episodios repetidos de ingesta excesiva de alimentos en un periodo corto de tiempo. Este trastorno grave y potencialmente fatal se basa en la preocupación excesiva de una persona por el control de su peso corporal. Esto las lleva a querer controlar el aumento de peso y a hacerlo de maneras insalubres.

Las personas que sufren bulimia se ven gordas, guiadas por una idea distorsionada de su propio cuerpo, a pesar de que tengan un peso normal. Esta percepción sobre sí mismas genera en ellas sentimientos permanentes de insatisfacción corporal, así como el miedo a engordar. Finalmente, esto provoca una incapacidad para controlar sus impulsos con la comida, además de no poder resistir el deseo de comer en exceso.

Deshacerse de las calorías y evitar aumentar de peso son los motivos para usar distintos métodos de autocontrol. Entre estos pueden encontrarse el vómito regular autoinducido, el uso de laxantes o de suplementos para bajar de peso. Ayunar desproporcionadamente, hacer dietas estrictas o ejercicio en exceso son otros métodos que utilizan quienes tienen bulimia. Esto puede provocar consecuencias como baja tensión arterial, frecuencia cardíaca irregular, cansancio, mareos, desmayos, sangre en los vómitos o en las heces, erosión y caries en los dientes, hinchazón en las mejillas (glándulas salivares).

La bulimia puede tener también consecuencias psicológicas, tales como baja autoestima, ansiedad y depresión, trastornos de personalidad, problemas en las relaciones sociales, autolesiones, pensamientos suicidas o suicidio.

Lo que sucede después de un atracón es un intento por deshacerse de las calorías adicionales recientemente ingeridas y se llama purgación, por ejemplo, el vómito después de comer en exceso. La gravedad de la bulimia se determina por el número de purgaciones a la semana: al menos una vez a la semana durante por lo menos tres meses. Las personas con bulimia nerviosa suelen ocultar tanto los atracones como las purgaciones.

Cómo darse cuenta de que alguien tiene bulimia y qué hacer para ayudar

Es cierto que quienes sufren este trastorno intentan ocultarlo, pero hay algunas señales que pueden ayudarnos a darnos cuenta de que están teniendo un problema:

• La preocupación o las quejas constantes sobre la supuesta gordura
• La autopercepción corporal distorsionada y excesivamente negativa
• El exceso de grandes cantidades de comidas en repetidas ocasiones, en especial de alimentos que la persona suele evitar
• Las dietas estrictas o ayunos después de comer en exceso
• La negación a comer en público o frente a otras personas
• La permanencia en el baño por largos períodos, después de comer o durante las comidas
• El exceso de ejercicio
• La presencia de llagas, cicatrices o callos en los nudillos o las manos
• El daño en los dientes y encías
• El cambio de peso
• La inflamación de las manos y los pies, así como en la cara y las mejillas a causa del agrandamiento glandular

Es importante escuchar a la persona, sin juzgar ni cuestionar lo que le pasa, teniendo presente que hay algo que la hace sufrir y que lo está pasando mal. También es fundamental animarla a pedir ayuda profesional y hacerle saber que no está sola.

En CABA, la Red de Trastornos Alimentarios brinda asistencia, prevención, capacitación e investigación de este tipo de problemática. Si necesitás información o asesoramiento, podés comunicarte con Salud Mental Responde al 4863-8888, de lunes al viernes de 8 a 20 horas.