Adoctrinamiento escolar

Caso Laura Radetich: "Dime de lo que te indignas y te diré quién eres"

Uno de los escritores más conocidos de Mendoza en Argentina, José Niemetz, ganador del premio Clarín de Novela, es, además, docente de Literatura desde hace décadas. Aquí nos deja su reflexión acerca del caso de la profesora Radetich, suspendida luego de una discusión política en el aula.

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MDZ Sociedad lunes, 30 de agosto de 2021 · 00:00 hs
Caso Laura Radetich: "Dime de lo que te indignas y te diré quién eres"
Laura Radetich y sus alumnos, en el aula. Foto: Captura de pantalla

Parece muy auspicioso que nos resulte indignante el estado del sistema educativo. Era hora. 

Era hora de que nos indignemos por el empobrecimiento de los docentes de nuestros hijos; por el deterioro de los edificios en el que trabajan esos docentes. Era hora de que nos indignemos por el punitivismo arcaico del Ítem Aula y por el ninguneo a la Paritaria Nacional Docente. Era hora de que nuestra memoria señale indignada a quienes trasformaron el Ministerio de Educación en una secretaría y a quienes quebraron la mutual de los docentes. Era hora de que tomemos conciencia sobre quiénes son los que redujeron el presupuesto educativo, quiénes desfinanciaron al Conicet y quién les hizo gritar sí se puedea niños de cuarto grado… 

Era hora de que nos indignemos por la situación de muchísimos chicas y chicos que asisten a clase sin los insumos (materiales y emocionales) mínimos para aprender; chicas y chicos que desertan por que sí y para nada, que se alcoholizan con una naturalidad pasmosa, que se drogan con lo que pueden, que protagonizan paralizados el ocaso de cualquier esperanza de futuro; que se dejan seducir por propuestas políticas violentas y antidemocráticas… 

Ah… ¡qué alivio la indignación! 

Y, ahora sí… como somos gente de bien, (y porque el orden de los factores sí altera el producto), después de habernos indignado hasta la verija por todo lo realmente importante (y, si nos queda un poquito de aliento en los pulmones y vergüenza en el alma como para hacerlo), indignémonos por el apasionado desborde de Laura Radetich

Es cierto, coincido: su clase fue intolerablemente indignante. ¿Se fue al pasto? ¡¡Y claro que sí!! Ante la imposibilidad de llegar a algún destino pedagógico transitando a través del confort de las autopistas, la docente se fue al pasto. Y lo logró: llegó a destino

Vi el video como cien veces y cada vez me indigné más. Sobre todo, porque a medida que reflexionaba sobre sus palabras, me iba dando cuenta que no podía rebatir nada de lo que decía

Laura tiene razón en todo lo que dice.  ¡Es indignante! 

Le pido a quien esté leyendo que no se apresure a calificar esto como un alegato en defensa de mi colega Laura Radetich. Por lo que se ve en las imágenes, si algo no necesita esta mujer es alguien que la defienda.

Lo que sí deseo es expresar mi solidaridad ante lo desproporcionado del arsenal político y mediático con el que se la está atacando. Mujer, inteligente y trabajadora… es un bocadito irresistible para los odiadores seriales que se multiplican como hongos. 

Y esta época electoral es la temporada de conejos en la que salen los cazadores de distractores como éste para que tengamos con qué entretenernos en la tele y en las redes. 

José Niemetz, autor de la novela "Tú eres para mí".

Hace más de treinta años que soy docente. He intentado siempre ponerles a mis clases una pasión similar a la que Laura le pone a las suyas. Yo también puteo, yo también me agito, yo también sufro la impotencia de enfrentarme con el vacío que me rodea. Al igual que ella, jamás he subestimado la inteligencia de un alumno. Porque, hay que decirlo, en las imágenes no hay una sola descalificacíón, ni siquiera una sola agresión al pibe

Si ella se ha tomado la molestia de hablarle de esa forma, con ese volumen y con ese tono es porque el pibe realmente vale la pena y como ella lo sabe, puso todo de sí en esos tres minutos. Esos tres minutos, con toda seguridad constituyen la mejor clase que la docente haya dado en toda su carrera). 

Alguien conoce una forma más clara de explicar que diciendo una frase tan perfecta como esta: "Perdió, gracias a Dios perdió. Perdió porque atacó al pueblo y se llevó la tarasca él y sus amigos ¿Entendés o no? ¿Pensás que el pueblo es boludo?"  

Algunos hablan de adoctrinamiento. No me tomaré el trabajo de explicar lo que adoctrinar significa. Para entenderlo, no es necesario saber nada de educación, solo hace falta conocer alguito de historia como para no ser tan liviano en el uso de los conceptos. Sí diré que cada día que ingreso al edificio escolar, la imagen de una Virgen rodeada de flores vigila la puerta y me pregunto si no estarán pretendiendo adoctrinarme. Veo bibliografía nacionalista, peronista, comunista, liberal, y me pregunto si en esa escuela no se estará adoctrinando a los alumnos. Veo la lista de las lecturas obligatorias de literatura, de economía, de historia… y me pregunto si no estarán adoctrinando. Veo concursos de cargos amañados, colegas echados de institutos privados, alumnos censurados por expresar o militar ideas y también me pregunto si no los estarán adoctrinando. Si vamos a hablar de adoctrinamiento, pues hablemos… pero no desde la superficialidad y el capricho.

Creo que a Laura Radetich los burócratas de turno la suspendieron no por dar la clase que dio sino por haber sido espuriamente filmada y viralizada. Es mucho más una víctima de esta dictadura de lo políticamente correcto en la que vivimos, que una reprobada por lo pedagógicamente correcto. Son muchos los docentes que intentan ponerle a sus clases la pasión y el amor que los chicxs merecen. Mucho más que preocuparme por estos docentes, deberíamos preocuparnos por los que no son como Laura Radetich: por los docentes desvitalizados, resentidos, frustrados y aburridos que hacen de la educación de los pibes un auténtico martirio. 

José Niemetz, docente y escritor 

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