A principios de mayo de 2021, ambientalistas y trabajadores denunciaron a Havanna por firmar un trato con Bioceres, una empresa argentina de biotecnología agropecuaria, para incorporar el trigo transgénico HB4 en algunos de sus productos. Pero lo que pocos saben es que este trigo podría estar en muchos más alimentos.

El trigo transgénico HB4 fue desarrollado por Bioceres en conjunto con el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y un grupo de investigación de la Universidad Nacional del Litoral. Lo que se hizo fue aislar el gen HB4 para incorporarlo al trigo, la soja o el maíz y así modificarlos con el fin de aumentar su tolerancia a la sequía.

De esta manera, Argentina, cuarto exportador mundial de trigo, se convirtió en el primer país del mundo en aprobar la comercialización de trigo transgénico, que va más allá de los alfajores Havanna. También podría estar presente en más alimentos de los que uno realmente cree.

Alimentación indirecta

Por el momento, la comercialización de productos vegetales modificados genéticamente está presente solo en el maíz, soja, colza y algodón. Los tres primeros ya lo consumen los humanos, pero no directamente: se usan como alimento para los animales o las plantas que luego se consumen.

Ahora, con esta investigación del HB4, el trigo modificado genéticamente ya se podría comenzar a usar para elaborar el pan o los cereales, por lo cual las empresas y panaderías comerciales ya se encuentran analizando este nuevo ingrediente. Por lo tanto es muy posible que se evalúe alguna ley para obligar a las empresas a detallar cómo fue elaborado este producto.

Así ocurre en Europa. Todos los exportadores e importadores tienen la obligación por ley de advertir si sus productos contienen algún ingrediente genéticamente modificado. Por lo tanto, no será fácil para Argentina introducir el HB4 en la Unión Europea.

"No puedo imaginar que ese trigo se autorice y tenga mercado en Europa. Acá, si la gente pudiera elegir, se importaría incluso menos alimento animal genéticamente modificado. Pues, en principio, ni en los huevos ni en la carne que consumen los europeos se aclara cómo se alimentó el animal del que provienen", indicó Daniela Wannemacher, experta en ingeniería genética de la Federación Alemana para el Medioambiente y la Conservación (BUND).

¿Qué opinas sobre los alimentos modificados genéticamente? ¿Avances de la ciencia o solo beneficio económico?