La Iglesia sancionó a un sacerdote por los abusos en el Cristo Orante

El Arzobispado de Mendoza sancionó al sacerdote Jorge Portillo por una serie de abusos sexuales cometidos en el Monasterio Cristo Orante de Tupungato. Como consecuencia, el hombre no podrá presidir celebraciones  por un plazo de cinco años. 

El expediente que se había abierto en su contra se expresaba contra el delito canónico de "abuso de conciencia", luego de que el 27 de diciembre de 2018 dos sacerdotes del Monasterio fueran detenidos. Oscar Portillo y Diego Roqué Moreno, fueron acusados entonces por abuso sexual en contra de un ex seminarista. 

Los hechos investigados habrían ocurrido entre 2009 y 2015, cuando la víctima era menor de edad. Tras las denuncias, Cristo Orante fue cerrado "preventiva y provisoriamente". Ambos religiosos fueron imputados entonces por la justicia por delitos contra la integridad sexual.

Como castigo, Portillo tendrá prohibido por cinco años "el ejercicio presencial o virtual del ministerio presbiteral, lo cual incluye expresamente presidir celebraciones eucarísticas u otras sacramentales, con participación de fieles, el ejercicio del ministerio de la palabra en cualquiera de sus formas".

Pero además, el hombre no podrá dictar cursos, charlas ni conferencias doctrinales o catequísticas, la dirección espiritual, el acompañamiento de procesos vocacionales; el desempeño de cargos en la Iglesia y la constitución de asociaciones de fieles en vistas a la vida consagrada así como el ejercicio de cualquier forma de autoridad en ellas.

"Queremos ratificar nuestro compromiso con el doloroso pero imprescindible camino de la verdad y la justicia en la Iglesia", manifestó el Arzobispado a través de un comunicado de prensa. Y destacaron la importancia de seguir profundizando la "dimensión preventiva respecto de cualquier tipo de abuso en nuestras estructuras, actividades y servicios, así como el cuidado de toda persona vulnerable".