Crisis social

Héctor y Belén se quedaron sin casa y viven en un auto junto a sus tres hijos

Vivir en un auto, esa es la realidad de una familia de 5 personas que perdió todo y su único lugar para habitar es un vehículo. Tres niños menores de edad y sus padres adoptaron, por obligación, un Dodge 1500 como hogar.

Nimsi Franciscangeli martes, 2 de noviembre de 2021 · 13:50 hs
Héctor y Belén se quedaron sin casa y viven en un auto junto a sus tres hijos
Foto: Nimsi Franciscangeli

Héctor y Belén son padres de tres niños y desde hace dos semanas viven en un auto. Duermen, comen, hacen las tareas escolares y juegan en un Dodge 1500 que se convirtió en su hogar.

La crisis económica que atraviesa el país, el desempleo, la inflación, sumado a un conflicto familiar, fue una bomba de tiempo para que los integrantes de esta familia, que estacionan su vehículo en Perdriel, Luján de Cuyo, quedaran en la calle. "Vivir en un auto es incómodo para los niños, no para los grandes, nosotros nos acomodamos. Nos preocupan los niños", describió Héctor, mientras se apoyaba en la puerta del auto esperando que alguien fuera a socorrerlo, ya que el vehículo se había quedado sin batería.

El desayuno de los niños: un vaso de leche 

Según los últimos datos otorgados por el Indec, en el relevamiento del primer semestre del 2021, en Mendoza más de 450 mil personas son pobres y aproximadamente 71.239 indigentes. La familia de Héctor y Belén se suman a esos números que engrosan las estadísticas. 

La rutina de la familia es distinta a lo que estaban acostumbrados. Se levantan temprano, concurren a estaciones de servicio para asearse, a comedores para conseguir alimentos y a la solidaridad de los vecinos para vestirse.

Buscan calzado.

Ambos adultos resaltaron que han intentado por todos los medios que los atiendan desde Desarrollo Social o la Municipalidad de Luján, pero hasta el momento la respuesta es la misma: "Nos dicen que regresemos después, que ahora no se puede, nos tienen a la vuelta con eso", describió Héctor. Además agregó que los integrantes de Defensa Civil fueron los únicos que se acercaron pero no regresaron más. 

Fueron a cumplir con un trabajo y el auto se quedó sin batería. 

El hombre se dedica a las instalaciones de internet. Está convencido de que unas semanas regresará a la empresa que lo tenía contratado, por tal motivo describió que ellos solo necesitan una ayuda temporal hasta que eso ocurra. Es decir, por ejemplo,  un mes alquiler hasta que él vuelva a su trabajo. "Cuando regrese a mi trabajo se nos mejoraría la situación", se ilusiona. 

Los niños están en edad escolar. Dos de ellos asisten a la escuela primaria (8 y 6 años) y uno es menor de 4 años, ingresa en el 2022 a Nivel Inicial. "Los niños a la escuela no faltan", dice orgullosa la madre, quien asegura que ya están inscriptos para el próximo año. Belén afirma que recibe la Asignación Universal y que con eso compra mercadería para ellos, pero que no es suficiente para pagar una casa. 

El baúl se divide en dos: alacena y cómoda.

Héctor, resaltó que desde que están en esta situación es llamativo la cantidad de personas que hay en la calle. "Hay mucha gente como nosotros", afirmó. Además, el matrimonio tiene claro algo: mantener la familia unida. Por eso más allá de una vivienda para poder pasar algunos días piden no ser separados de sus hijos. "Los niños se dan cuenta de la situación, y lo único que nos piden es que estemos juntos", aclararon. 

Valeria y Jésica las impulsoras de la movida solidaria

Jésica tiene un comedor llamado "Sueñitos de Ángeles", en Luján de Cuyo. Allí alimenta a 150 personas. Valeria tiene un merendero "Vivir, soñar y ser feliz", en el mismo Departamento y le brinda una infusión a más de 60 niños. Entre las dos se dieron cuenta de la situación que está viviendo la familia de Héctor y Belén y comenzaron una cruzada solidaria para conseguir alimentos, ropa y una audiencia con el Ejecutivo Municipal. 

El comedor se ubica en Tres Esquinas, Perdriel. 

En diálogo con MDZ, Jésica resaltó: "Es imposible acceder a alguien del Gobierno y mucho más complejo desde el Municipio, realmente no tengo nada en contra de nadie pero al intendente no le importa la gente en esta situación. Él solo quiere hacer rotondas para que la gente tiene plata pase tranquilo, mientras quienes realmente lo necesitamos estamos abandonados".

Por otro lado, Valeria aseguró que tratan de ayudarlos con agua, comida, ropa. "Les damos una mano, esta situación nos llegó al corazón. Los niños están mal, no pueden dormir en un auto", exclamó. 

Para donaciones comunicarse con el comedor: 2616 91-5598 

 

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