Una junta médica tendrá que determinar de qué murió el niño que tomó dióxido de cloro

Como parte de los estudios complementarios que el Ministerio Público Fiscal ordenó para determinar si la ingesta de dióxido de cloro fue la causa de muerte de un niño de 5 años en la localidad neuquina de Plottier, una junta médica se abocará a investigar qué ocurrió realmente. Hasta el momento el caso fue calificado como muerte dudosa.

La medida ordenada por la fiscalía de Homicidios requiere que la junta médica elabore "un informe conjunto con el objetivo de determinar la causa de la muerte del niño, sobre la base de los estudios complementarios y exámenes médicos realizados en el curso de la semana".

Integrarán la junta médica profesionales del Cuerpo Médico Forense y un especialista del Sistema Público de Salud de Neuquén.

La muerte del niño se produjo el domingo pasado luego de haber ingerido el día anterior dióxido de cloro que le dieron sus padres sospechando que tenía coronavirus por los síntomas que mostraba.   

La autopsia determinó que falleció debido a un “fallo multiorgánico”, sin poder establecer las causas, aunque se aclaró que el niño no era un caso positivo de coronavirus.

La hipótesis de que el nene podría haber muerto por la ingesta de dióxido de cloro se investiga por el informe del médico que lo atendió en la guardia del hospital de Plottier, en la madrugada del último domingo, donde los propios padres indicaron que le habían proporcionado la sustancia el día anterior.

A través del informe que brinde la junta médica se buscará establecer si existe relación entre la ingesta de dióxido de cloro y los efectos tóxicos en el organismo del niño. O si el fallecimiento fue como consecuencia de otra causa.