¿Por qué los que intentan dejar de fumar no lo consiguen?

¿Sabías que el próximo domingo tendrá lugar el Día Mundial sin Tabaco? El mismo existe para recordar los riesgos que conlleva el consumo de tabaco para la salud y cobra todavía más importancia en plena pandemia.

De hecho, el comparador Acierto.com comparó cómo es una vida con y sin tabaco, y analizó los hábitos de aquellos que sufren esta adicción.

Las consecuencias del tabaco

Así, el tabaco se salda actualmente con más de 52.000 muertes anuales. La población fumadora, además, es del 24%; una población que cada vez empieza antes y que no se ha visto disuadida por los cambios legislativos de los últimos años.

Las cifras son escalofriantes si tenemos en cuenta los riesgos asociados a su consumo continuado: adicción, ansiedad, aumento del riesgo de cáncer, desarrollo de problemas cardiovasculares varios, problemas pulmonares y respiratorios en general, disminución del sentido del olfato y un largo etcétera.

En el caso del coronavirus, recientes informes relacionan el tabaquismo con una progresión negativa y resultados adversos en pacientes con Covid-19. Algo que no sorprende si tenemos en cuenta que el consumo de tabaco se asocia con numerosas enfermedades respiratorias y a un sistema inmunitario más débil. Por no hablar de los riesgos asociados a la manipulación de la mascarilla y a las gotitas respiratorias que pueden propagarse al exhalar humo.

8 de cada 10 intentan dejar de fumar

La parte positiva es que estamos cada vez más concienciados. De hecho, conocer estas nefastas consecuencias es un aliciente para dejar el tabaco. Hasta 8 de cada 10 han intentado dejar de fumar y ha puesto medidas para conseguirlo. Su éxito, sin embargo, es cuestionable: el 58% ha fracasado.

Las conclusiones del análisis indican también que el 41% de quienes han querido abandonar el tabaco sin éxito se han puesto manos a la obra entre una y dos veces, mientras que el 17% restante ha tratado de hacerlo en más de tres ocasiones. Los métodos más habituales son los parches de nicotina, los chicles de nicotina e incluso la hipnosis y otras terapias. ¡Todas fallidas!

• Qué errores cometemos a la hora de dejar de fumar
• Confiar en la “fuerza de voluntad".
• Recurrir a métodos inadecuados.
• Desanimarnos por el fracaso de tratamientos anteriores.
• Falta de motivos suficientes para dejar de fumar.
• Efectos “secundarios” de dejar de fumar.
• Miedo a engordar.
• Carecer de estrategias alternativas para gestionar la ansiedad.
• Plantearse metas muy ambiciosas e ignorar los pequeños avances.
• Confundir una caída con una recaída.
• Falta de apoyo del entorno.
• Minusvalorar los beneficios que dejar de fumar tiene para la salud.

Ahorro: comparativa con y sin tabaco

Tampoco podemos perder de vista el ahorro que supone dejar de fumar, otra de las grandes razones para hacerlo. Según los cálculos teniendo en cuenta cuenta el precio ocupa el 14% del presupuesto medio anual.