Reabrieron los bancos para pagar jubilaciones y planes: largas colas y amontonamiento
Hoy las entidades bancarias reabrieron para pagarle a jubilados, pensionados y beneficiarios de planes sociales. Desde muy temprano se podían observar largas filas y poco respeto por el distanciamiento social recomendado.
Los bancos reabrieron sus puertas hoy para pagar los haberes de jubilados, pensionados y beneficiarios de planes sociales, y desde muy temprano se vieron largas colas de personas que no tienen tarjeta de débito y no habían podido cobrar durante las últimas dos semanas.
Ya desde la madrugada se podía ver a personas, particularmente adultos mayores, "acampando" cerca de los bancos para no perder su lugar en la fila. Una vez que abrieron sus puertas, no se pudo evitar el caos, ya que la cantidad de personas presentes hacían difícil una organización eficiente.
En el Banco Nación de Villa Nueva, por ejemplo, se podía observar al menos cuatro colas para cobrar diferentes beneficios, y en ninguna se respetaba el distanciamiento social recomendado por el Gobierno y expertos de salud. Estas filas -una para los cajeros automáticos, otra para la atención por ventanilla, otra para cobrar jubilaciones y finalmente una para las asignaciones por hijo- daban literalmente la vuelta a la manzana.
Dora, una jubilada de 70 años, contó a MDZ que había llegado al lugar a las 4 de la mañana, y había tenido problemas con la policía, ya que uniformados que pasaron por el lugar la acusaron de romper la cuarentena obligatoria. "Nos sentamos cerca de la entrada, y nos vinieron a correr. Nos trataron como si fuéramos delincuentes", aseguró.
En el Centro, en tanto, se repitió la situación. En el banco Supervielle de calle las Heras Preventores de la Municipalidad intentaban ordenar la situación, con miles de personas esperando para cobrar sus haberes.
Estas situaciones se repetían a lo largo y ancho del país. Desde Buenos Aires llegan reportes de problemas de toda índole en la puerta de los bancos. Uno de los más repetidos es la falta de policías para ordenar las interminables filas que se formaron.