Efecto positivo: las aves rapaces vuelven a las plazas del centro

Las restricciones de circulación y aislamiento social por la pandemia de coronavirus traen algunos efectos positivos al medioambiente, con diversas especies de animales que habían perdido su hábitat y vuelven a ocupar el espacio urbano. Ese es el caso de algunos tipos de aves rapaces que incrementaron su actividad en las principales plazas de la ciudad de Mendoza, según observaciones realizadas por el municipio y la Provincia en un relevamiento.

En el marco del flamante Programa de Conservación de la Biodiversidad Urbana de la Municipalidad capitalina y del Programa de Conservación y Rescate de Aves llevado adelante por la Secretaría de Ambiente de la provincia, en conjunto con la Fundación Cullunche, se realizó una recorrida por distintas plazas y espacios verdes de la capital provincial con la finalidad de realizar un relevamiento de la fauna durante la cuarentena.

Allí se detectó una mayor presencia y actividad de algunas especies de aves rapaces, como el gavilán mixto, el cernícalo americano y el halcón peregrino, las cuales son claves para el equilibrio de los ecosistemas urbanos de Mendoza, dado que ejercen un control natural en la población de animales como ratas, pericotes, palomas y plagas de insectos que son propensos a experimentar superávit poblacional dependiendo de los factores de cada temporada.

En la actualidad, estas aves se han visto forzadas a modificar su zona de nidificación trasladándose hacia zonas menos urbanizadas y dejando los sectores céntricos sin controladores naturales, a causa de la actividad humana y la captura y el tráfico ilegal de especies, pese a que no representan una amenaza para mascotas domésticas como perros y gatos.

Por otro lado, los organismos gubernamentales intervinientes están desarrollando una plataforma para un monitoreo participativo con el ciudadano, a fin de generar la posibilidad de que los vecinos puedan cargar información de avistamientos de fauna para georreferenciarlas a través de una aplicación. Esto no sólo permitirá construir un registro sobre lo que se ve desde los balcones o jardines de sus casas, sino que también promoverá la concientización, la sensibilización, la importancia de estas especies y la protección de las mismas.

“Estamos lanzando un programa de conservación de la biodiversidad urbana. Hemos hecho un recorrido por diferentes plazas y espacios verdes para detectar la presencia y ausencia de algunas especias que son clave en los ecosistemas. La presencia de este tipo de especies da cuenta del equilibrio del ecosistema urbano, dado que son predadores de algunas otros animales, como ratas y pericotes, que son un problema en la Ciudad”, resumió Sebastián Fermani, director de Ambiente y Desarrollo Sostenible del municipio.