Frustración por el 2020: cómo manejarla para afrontar el nuevo año
El año que se va deja planes cancelados, metas no alcanzadas u objetivos replanteados. Un especialista en neuropsicología explica qué hacer ante la frustración y cómo prepararse para recibir el 2021.
El 2020 para muchos será un año de planes cancelados, de metas no alcanzadas o replanteadas. La pandemia por Covid-19 ha llevado a que millones de personas en el mundo se sientan frustradas y les sea dificultoso mirar hacia adelante esperando salir adelante en el 2021.
Es importante afrontar esta situación sin precedentes con conocimiento, entendimiento y fortaleza para poder hacerle frente a los desafíos que vendrán y no caer en la frustración por aquello que no se logró. Por ello, MDZ consultó al psicólogo Jorge Quiroga, con maestría en neuropsicología e integrante del servicio Rehabilitación Cerebral de Neuromed Argentina, qué hacer ante la frustración y cómo prepararse para recibir el 2021.
Quiroga explica que, desde el punto de vista neuropsicológico y neurofisiológico, se entiende por frustración a un sentimiento negativo generalmente asociado al estrés. Que tiene que ver con la falta de consecución de deseos, pero de manera más extendida en la consecución de objetivos. Estos objetivos por diversas variables pueden verse “trabados” y terminan con un resultado no esperado, esto genera un estado de angustia a consecuencia de no haber conseguido lo que se buscaba.
“Aquellas personas que organizan sus deseos y los transforman en objetivos, generalmente tienen en cuenta la posibilidad de que algunas cosas podrían no ser como uno lo espera”, aclara el profesional y agrega “En estos casos la frustración suele ser mejor manejada porque uno puede contemplar que algunos pasos que uno tiene que dar para conseguir ese objetivo podría no ser fluido”.
El grado de frustración que experimenta la persona está relacionado con lo que representaba para sí ese objetivo que no se cumplió. “Hay personas que durante la pandemia no pudieron cumplir ninguno de los objetivos del año, en este caso evidentemente es muy alta la frustración. Hay otras personas que lograron acomodarse y sobrellevarlo mejor o contemplar que, con algunos de los objetivos cumplidos, en el 2021 uno puede intentar recuperar alguna pérdida que tuvo durante el 2020”, señala Quiroga.
Además, cuando la frustración es sostenida en el tiempo puede generar sensación de estrés. “El estrés no se trata de un concepto puramente psicológico, o una situación en la que uno cambiando ciertas condiciones podría resolverlo. Hay casos en los que se puede presentar síntomas: alteraciones fisiológicas, alteración del sueño-vigilia, alteración de los ritmos de alimentación y, cuando es sostenido en el tiempo, puede desencadenar en patologías. El organismo disminuye la capacidad de respuesta a las enfermedades”.
¿Qué hacer cuando se siente frustración?
“La frustración uno debería tratar de transformarla en experiencias, al igual que los errores. Aunque muchas veces resulta más fácil decirlo que hacerlo”.
“Cuando logramos esto, empiezan a formar parte de un patrimonio mental para poder plantearse nuevos objetivos más precisos, poder organizarse mejor y de este modo sobrellevar mejor las situaciones imprevistas”.
Ese es el modo de salir adelante cuando uno se siente frustrado, “sentir lo que pasa, pero también pensar en modos de salida de esa situación. Que no sea simplemente aliviar los síntomas o la sensación de malestar como finalidad”.
¿Cómo plantear nuevos objetivos para el 2021?
Para evitar caer en la frustración y poder diseñar objetivos que sean factibles Quiroga recomienda tener metas concretas y precisas que a su vez se puedan jerarquizar según su relevancia.
“Cuando planifico tengo en cuenta la realidad mental, es decir lo que me gustaría, y la realidad concreta, lo que tengo que hacer y de qué manera”. Esto es clave al momento de diseñar los objetivos.
Quiroga además, pone énfasis en las nuevas oportunidades que pueden aparecer en las crisis, especialmente la económica, y en la importancia de estar atentos para identificar esas oportunidades. “Si uno logra darle a la sociedad algo que le es útil y necesita, termina en un rédito que nos hace crecer a todos como comunidad, ese es el modo de enfrentar esta situación”, concluye.