Final feliz: le regalaron una bicimoto al repartidor en rollers
Luciano Lazzati, el estudiante de Psicología que trabaja como repartidor de la app de delivery Glovo para costear su carrera, recibió una bicimoto de regalo de parte de la empresa a la que le había comprado el rodado que le robaron. "Me hicieron prometer que voy a terminar la carrera", contó.
Luciano Lazzati, el estudiante de Psicología que trabaja como repartidor de la app de delivery Glovo para costear su carrera, recibió una muy buena noticia tras el robo de la bicimoto que sufrió al comienzo de la semana. La empresa a la que le había comprado la bicicleta que le robaron -Bici Motors- tuvo un destacable gesto con el joven y le regaló otra bicicleta para que pueda continuar trabajando para pagarse sus estudios.
"Fueron tan pero tan grandes que le regalaron otra bicimoto para que continúe con su trabajo para pagarse los estudios. Es una acción digna de divulgar, es gente con un corazón enorme. Qué estas buenas acciones también se expandan. Gracias infinitas. La vida seguro se encargará de recompensarlos", contó Sandra, una amiga del joven que lo ayudó a conseguir la nueva bicicleta.
"Quisiera agradecer a Bici Motors por el regalo de la bicimoto que me regalaron. Bici Motors me hizo prometer sólo una cosa: terminar los estudios. No sólo lo haré por ellos, lo haré por toda esta Argentina y porque se acabe la delincuencia acabando con la pobreza que la genera", escribió Luciano, emocionado por la ayuda que recibió.
Hace un mes, MDZ le hizo una nota al joven, quien contó que como no disponía de moto ni bicicleta le propuso a la empresa hacer los envíos en rollers. Con mucho esfuerzo, Luciano pudo comprarse una bicimoto hace dos semanas para mejorar la cantidad de entregas y la velocidad de las mismas. Sin embargo, a sólo dos semanas de cambiar los rollers por la bicimoto fue víctima de la inseguridad y sufrió el robo del rodado.
Afortunadamente, la historia tuvo un final feliz y el joven estudiante pudo recuperar su herramienta de trabajo a partir del destacable gesto de la empresa a la que le había comprado el rodado que le robaron.