Caso Carrazco: condenaron al policía Guzmán, pero no irá preso

Este jueves al mediodía se conoció la sentencia en el segundo juicio por la muerte de Lucas Carrazco (22), el joven hincha de Independiente Rivadavia que murió en 2014 tras ser herido durante los incidentes que se generaron en las inmediaciones del estadio de la Lepra.

El único acusado, el policía Diego Guzmán Zalazar (29), fue condenado a tres años de prisión condicional por cometer un homicidio "en exceso del cumplimiento legítimo del cargo" y no irá preso. Además, el tribunal decidió condenarlo a siete años de inhabilitación para ocupar cargos policiales y dispuso que se investigue a tres de sus compañeros por brindar falso testimonio durante el juicio.

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Antes de dar a conocer la sentencia, el tribunal compuesto por los jueces Mauricio Juan, Eduardo Martearena y Laura Guajardo, ofreció la palabra al acusado y éste se negó a declarar.

La Fiscalía, representada por el fiscal Darío Tagua, había pedido que Guzmán sea condenado a 18 años de prisión y que fuera juzgado por "homicidio simple con dolo eventual agravado por la utilización de arma de fuego y por ocurrir en las inmediaciones de un espectáculo deportivo". La querella, representada por los abogados Sergio Salinas y Lucas Lecour, acompañó este pedido. La defensa, a cargo de Rafael Manzur, había solicitado la absolución del acusado o que sea condenado por homicidio culposo.

Lo que llamó la atención es que el tribunal decidió condenar a Guzmán Zalazar por "homicidio en exceso del cumplimiento legítimo del cargo", una figura que no había sido planteada por ninguna de las partes. "Entendieron que fue un homicidio simple, pero excediéndose en la función de policía, una figura que contempla una pena ridícula. Es un homicidio doloso y así lo entendieron los jueces", explicó Sergio Salinas, uno de los abogados querellantes.

"Sorprende que ni siquiera la defensa planteó la legítima defensa en el ejercicio del cargo. Esto no estaba en los alegatos de ninguna de la partes. No nos sorprende la condena sino la manera en que se llegó a ella. Vamos a esperar los fundamentos para ver por qué se inclinaron por esa figura", agregó Lucas Lecour, el otro abogado querellante.

"Nosotros no podemos apelar, pero el fiscal sí puede hacerlo. La familia Carrazco ha sido olvidada y vuelve a estar desamparada por la Justicia", resaltó Salinas sobre la posibilidad de presentar un recurso de casación luego de que se conozcan los fundamentos de la sentencia.

Cabe destacar que este fue el segundo juicio que se realiza en los tribunales mendocinos por la muerte de Carrazco. En julio de 2016 se realizó el primer juicio en la Segunda Cámara del Crimen con los jueces José Valerio (hoy ministro de la Corte), Arlinton Uliarte y Ramón Ariel Spektor.

El 20 de septiembre de ese mismo año, los integrantes del tribunal se inhibieron de seguir entendiendo en el juicio. Esto debido a que las audiencias se suspendieron por más de 15 días hábiles por los problemas de salud del juez Valerio que, según el certificado médico agregado al expediente, le impedía levantarse de su cama.

Sin embargo, ese mismo día, Valerio se presentó a dar clases de consulta en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Cuyo. Esto provocó que el juicio, que estaba en su etapa final, fuera declarado nulo.

La madre de Lucas, Viviana Espina, decidió quitarse la vida en julio de 2017, cansada de su largo peregrinar en busca de justicia por la muerte de su hijo. Espina figuraba como querellante en la causa y su familia debió luchar durante varios meses para que el padre de Lucas, Daniel Carrazco, fuera aceptado como parte de la querella en reemplazo de la mujer.