Jorge Capitanich, la Internacional Justicialista y sus antecedentes
Jorge Capitanich, exgobernador del Chaco y recientemente electo diputado provincial, envío un combativo mensaje a los dirigentes kirchneristas en su provincia tras la condena a Cristina Kirchner.
Jorge Capitanich volvió a la escena nacional este martes después de que se conociera un mensaje que el dirigente chaqueños hizo circular entre los dirigentes que responden a su persona. Enmarcado en la defensa de Cristina Fernández de Kirchner, el mensaje compara los hechos con los bombardeos en Plaza de Mayo, de los cuales se cumplieron setenta años este lunes.
Jorge Capitanich vuelve al ataque
Como en sus mejores épocas de Jefe de Gabinete rompiendo un diario en plena conferencia de prensa, Jorge Capitanich arremetió contra lo que él considera "oligarquía dominante", que está atacando al "campo popular". "Grupos económicos nacionales y transnacionales, el poder judicial, los medios de comunicación concentrados", son los enemigos que plantea Capitanich. Según el exgobernador, estas "corporaciones dominantes" se dedican a ejercer el poder persiguiendo opositores.
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Por eso, como contrapartida, en su mensaje llama a la "movilización popular en las calles", que considera "la herramienta fundamental del pueblo". Acorde a los tiempos que corren, también hizo un llamado a la militancia en "cada espacio digital", además de estar presente en el territorio.
Llama la atención que Capitanich habla de la necesidad de unidad e integración "con el objetivo de construir una gran elección el 26 de cotubre". No hay referencias a las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre, a las cuales planeaba presentarse Cristina Kirchner, quien dice, justamente, defender en este comunicado. Algunos se preguntan si se trata de un mensaje para Kicillof, al cual muchos presionan hoy en día para dar marcha atrás y unificar elecciones.
La Internacional Justicialista
Como dato curioso, Capitanich pidió "avanzar en la construcción de una Internacional Justicialista, que consolide la solidaridad de partidos, movimientos obreros y organizaciones sociales en todo el mundo".
Aunque parezca una idea descabellada, Loris Zanatta, politólogo italiano especializado en el peronismo, ya ha publicado un libro titulado "La Internacional Justicialista-Auge y Ocaso de los Sueños Imperiales de Perón".
En este texto, el académico italiano habla de las intenciones del Juan Domingo Perón de crear una agrupación de países en torno a las ideas justicialistas, en plena Guerra Fría. Entre los bloques norteamericanos y rusos, Perón impulsaba su denominada "Tercera Posición" como un "justo medio" entre capitalismo y comunismo. Además, se veía a la Argentina como un puente natural entre la Europa Católica y la América latina. Así, el peronismo jugó con la idea de ser un referente de una especie de unión o liga "panlatina" en el contexto de las décadas de 1940 y 1950.
Las intenciones de convertir a Buenos Aires en un "eje de la latinidad" en contra de la hegemonía estadounidense en occidente, se vieron reflejadas en varias acciones que retrata Zanatta. Ejemplo claro de ello fue la ayuda dada a una aislada España con el comercio del trigo argentino y el mismo viaje que Eva Perón haría por Europa publicitando la "tercera posición peronista". No tan conocida, pero con las mismas intenciones, fue la Misión de Buena Voluntad en América Latina. Esta consistió en una gira presidida por Diego Luis Molinari, un radical devenido en peronista, por los países de la región. El objetivo era lavarle la cara un peronismo manchado por las noticias que llegaban de Estados Unidos.
Zanatta afirma directamente que "el objetivo era peronizar América Latina". Aunque la idea de la "Internacional Justicialista" tuvo sus momentos de optimismo, como cuando Vargas llegó al poder en Brasil, nunca fue posible para Perón contrarrestar la influencia de Washington tanto como hubiese querido. Al fin y al cabo, los gobiernos de la región estaban más necesitados de la ayuda de los Estados Unidos antes que Buenos Aires.
