El 25 de mayo y el fuego cruzado entre Macri y Fernández - Fernández

Por un lado, el arzobispo porteño Mario Poli pidió a la clase política "un gran pacto nacional" y en sintonía con él, su par de La Plata, Víctor Manuel Fernández, solicitó "construir consensos" y que las fuerzas políticas firmen un acta para en común trabajar por los pobres. Sin embargo, los discursos de campaña de los principales candidatos a presidente siguen en línea con lo que siempre ha sido en Argentina lo normal en una campaña electoral: criticar al otro y la ausencia de propuestas explicadas y bien fundamentadas. 

En la Quinta de Olivos, el presidente Mauricio Macri encabezó el tradicional locro del 25 de Mayo. Asistieron vecinos y jubilados, a quienes el Presidente visitó en los últimos meses, representantes de ONGs, emprendedores, deportistas, así como personal que se desempeña en la Residencia de Olivos, funcionarios y legisladores, y miembros del cuerpo diplomático, entre otros invitados al almuerzo patrio. Y en tono de campaña aseguró que “volver atrás sería destruirnos y perder todo lo que hemos ganado y progresado en estos tres años y medio”.

En un mundo “que cambia en forma permanente” debemos “tener más proyectos para crecer, desarrollarnos y que cada argentino tenga una oportunidad”, expresó. Y remarcó que “ese cambio lleva esfuerzo”, ya que “aquellos que emprendieron la Revolución de Mayo tuvieron que recorrer esa etapa”, pero “siguieron adelante”, por lo que “son los momentos en que tenemos que demostrar la convicción por lo que se hizo”. En ese sentido, remarcó que “volver atrás sería destruirnos y perder todo lo que hemos ganado y progresado en estos tres años y medio”.

Por el lado de la oposición, el candidato a presidente de la fórmula que integra Cristina Kirchner,  el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, durante un acto en la localidad de Merlo, provincia de Buenos Aires afirmó que trabajará para "sacar del fondo a los cuatro millones de pobres que dejó (Mauricio) Macri". También expresó que "ningún argentino debe pagar el costo de la deuda (contraída durante la gestión de Mauricio Macri)".

También cargó contra Macri al señalar -según su criterio- que  la situación económica de Argentina es similar a la del 2003.

"En el 2003, era un país destruido y claudicante. Cuando veo este presente, que se parece tanto al país que recibimos en el 2003, no le tengo miedo porque volveremos hacer lo que ya hicimos".  Y cargó contra el presidente de la Nación al afirmar que "nosotros no improvisamos como Macri".