El motivo por el que se caen proyectos del Distrito Minero Malargüe

El plan de exploración minera para buscar cobre en Malargüe se topó con una realidad ambiental que complica los planes: la cantidad de condicionantes ambientales que tiene la zona, en particular los glaciares. Es lo que ocurre con la segunda etapa del Distrito Minero Malargüe Occidental, que podría quedar sensiblemente diezmado tras las recomendaciones de los organismos técnicos y gubernamentales. El IANIGLA y la Municipalidad de Malargüe, por ejemplo, pidieron que sean descartados otros 10 proyectos y que sean suspendidos temporalmente otros que están dentro del paquete enviado para la evaluación ambiental. Ese grupo se suma a otros dos que ya habían sido dejados de lado. La objeción es porque casi la totalidad de la superficie está cubierta por glaciares o área periglacial, o tienen una superficie de glaciares muy alta. También se suma que hay proyectos en la cuenca que abastece a la laguna de Llancanelo.
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El IANIGLA, organismo que tiene a cargo el inventario y control de los glaciares, fue contundente al recomendar que no se aprueben los proyectos que están "completamente" en área glaciar y periglacial y actual de igual modo pidió suspender los que tienen una alta superficie comprometida por los glaciares hasta que se precisen datos sobre las tareas y la delimitación de las áreas. En el primer grupo están los proyectos Angélica, Chamamé, Excalibur, Mel, Piedras Verdes, Sofi, Villagra y Tango. En el segundo entran Cuprum, El Destino, Titán, PAS, Tordillo, Malargüito, Clotilde, Roma y Veneto y Belluno. El detalle del proyecto El Destino es clave, pues es el que se usó como puntapié para la evaluación ambiental de todo el Distrito Minero 2.
La Municipalidad de Malargüe también pidió dejar de lado a los proyectos en los que toda la superficie está comprometida por la presencia de glaciares, coincidiendo con el IANIGLA. Pero también los proyectos “TANGO”, “EXCALIBUR”, “CHAMAMÉ”, “BELLUNO” y “TORDILLO "por estar ubicados en la única cuenca endorreica de la provincia, Cuenca Hídrica de Llancanelo, de la cual forma parte el Río Malargüe, que desagua en la Laguna homónima, siendo además, Reserva Provincial y Sitio RAMSAR. Provee de agua para consumo humano al 88% de la población del departamento y para riego al único oasis productivo del mismo".
La segunda etapa del Distrito Minero tenía 29 proyectos. Dos ya fueron dados de baja y ahora piden anular 7 más, por lo que quedarían 20. Además quedarían condicionados otros 10.
La evaluación ambiental tiene, según los organismos que dictaminaron, muchas carencias. Es algo similar a lo que ocurrió con la primera etapa del Distrito Minero Malargüe. Entre otras cosas, por ejemplo, hay proyectos en los que se menciona que se llevará agua con camiones cisterna, pero se trata de zonas inhóspitas, sin caminos ni posibilidades de lograr la llegada de transporte. "Transporte del agua desde el punto de captación a los puntos de uso o almacenamiento: El transporte del agua se prevé realizarlo mediante camiones cisternas. Incompleto: no es posible este medio de transporte en este ambiente", dice el dictamen de la comuna. Lo que ocurrió con el informe de impacto ambiental es que se hizo un modelo estandarizado y se replicó para todos los proyectos, sin tener en cuenta los matices y diferencias ambientales, sociales y logísticas.
"Los proyectos incluidos en El MDMO 2 se desarrollan en un amplio rango de elevación, que va aproximadamente desde los 1100 a los 4430 msnm (metros sobre el nivel del mar). Este dato de elevación es muy importante puesto que determina condiciones y características topográficas, climáticas y meteorológicas diferentes que hacen que la región no pueda considerarse como una unidad homogénea desde el punto de vista ambiental", explican desde el IANIGLA.
Recortado
En el dictamen del IANIGLA se describen todas las carencias que tienen los informes ambientales de cada proyecto, sobre todo por la falta de especificidad. Y en el plano general, se pide no aprobar una serie de esos proyectos. "De acuerdo a las consideraciones previas, particularmente en lo que se refiere a glaciares y ambiente periglacial, solicitamos No aprobar los proyectos que se desarrollan completamente en el ambiente periglacial. Estos son Angélica, Chamamé, Excalibur, Mel, Piedras Verdes, Sofi, Villagra y Tango de acuerdo a lo establecido en la Ley 26639", dice el dictamen. Dos de esos, ya fueron descartados antes: Mel y Piedras Verdes.
Además, piden suspender también los proyectos Cuprum, El Destino, Titán, PAS, Tordillo, Malargüito, Clotilde, Roma y Veneto y Belluno por estar “parcialmente en dicho ambiente”. Esa suspensión sería, según la recomendación del IANIGLA, “hasta tanto se detallen las actividades a realizar y la ubicación de las mismas en la etapa de exploración”.
Para más detalle, según el dictamen, “la totalidad de la superficie correspondiente a los emprendimientos Angélica, Chamamé, Excalibur, Mel, Piedras Verdes, Sofi y Villagra se desarrollan en ambiente periglacial”, mientras que en el proyecto Tango la superficie prohibida es del 93%. La ley de Glaciares es la norma que prohíbe la minería y otras actividades en los cuerpos de hielo descubiertos, cubiertos y de roca. Además la zona periglaciar tiene la misma protección. Justamente es un tema de fuerte debate y presión, pues hay intenciones de modificar la norma para que las restricciones sean menos abarcativas.
El IANIGLA advierte además por la vulnerabilidad de la zona. “Notamos que el informe muestra falencias en la evaluación de las sensibilidades y vulnerabilidades de cada una de las áreas que componen al MDMO 2”, explican. “Entendiéndose por vulnerabilidad al grado en que el cambio climático podría dañar o perjudicar un sistema en función de la sensibilidad al clima como de la capacidad de adaptarse a una nueva condición”, agregan.
El Distrito Malargüe es el concepto que usó el Gobierno para impulsar un plan de exploración minera, particularmente para evaluar el potencial de cobre que hay en la zona. Para ejecutarlo se tomó toda la zona como un área y se realizaron estudios ambientales generales y específicos. La empresa Impulsa Mendoza lo lideró y financió y los titulares de las propiedades mineras podían adherir. La intención era evaluar todos los proyectos juntos y enviarlos en paquete a la Legislatura para que sean tratados en combo y cumplir así con la ley 7722. El primer grupo de proyectos fue aprobado. El segundo está en evaluación y ha tenido más objeciones.