El régimen de Maduro detuvo a otro argentino en Venezuela

El régimen de Nicolás Maduro en Venezuela anunció este viernes la detención de otro ciudadano argentino, según informó el ministro del Interior y de Justicia, Diosdado Cabello. Se trata de Germán Darío Giuliani, un abogado argentino que se suma al caso del gendarme Nahuel Gallo -que continúa preso en un paradero desconocido- y al de Pablo Gonzalo Carrasco, un experto en ciberseguridad que finalmente fue liberado tras haber sido retenido esta semana.
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El número 2 del chavismo, Diosdado Cabello, anunció la captura de Giulani en medio de una ola de arrestos que incluyó la de Pablo Guanipa, la mano derecha de líder de la oposición venezolana, María Corina Machado. Este último había llegado a enviar un mensaje por redes sociales antes de ser detenido.
Según surge de sus perfiles en redes, Giuliani es abogado, especialista en derecho penal y laboral. Hace dos semanas, el 5 de mayo, posteó imágenes en un restaurant ubicado en Anzoátegui, uno de los veintitrés estados de Venezuela, al este de Caracas, con costas hacia el Mar Caribe. El 23 de abril también subió un video en Anzoátegui, frente a la clínica Jaque Mate.
En su cuenta de Linkedin, Giuliani se presenta como un abogado que encabeza un estudio jurídico que reúne a varios especialistas en derecho penal, laboral, civil, comercial y de familia. “He trabajado en campañas integradas por grandes entidades financieras como Banco Santander Rio, La Banca Nacional de Laboro, Hexagon Bank y HSBC y han sido reconocidos con varios premios durante mi carrera”, agrega en su presentación.
“Busquen en Argentina al inocente este, búsquenlo”, ironizó Cabello al anunciar la detención del argentino, que hasta el momento no se conoce qué cargos se le imputan. En las últimas horas, el régimen realizó una serie de detenciones bajo acusaciones de "actos terroristas" para sabotear los próximos comicios que se realizarán el domingo.
Así fue el caso de Pablo Gonzalo Carrasco, un experto en ciberseguridad mendocino que estuvo detenido este jueves tras ser acusado de formar parte de una “conspiración” para sabotear las elecciones regionales y parlamentarias, además de planear ataques contra embajadas, hospitales, estaciones de servicio, comandos policiales e instalaciones del sistema eléctrico.
Sin embargo, el joven mendocino había ingresado a Venezuela con un pasaporte italiano para participar de un evento de ciberseguridad organizado por el banco Microfinanzas, por lo que finalmente se reconoció que fue un malentendido y se procedió con su liberación.
Muy distinto es el caso de Nahuel Gallo, el gendarme secuestrado desde el 8 de diciembre cuando cruzó por tierra desde Colombia a Venezuela para visitar a su hijo que tuvo con la venezolana Bárbara Alexandra Gómez. El uniformado también fue acusado por el régimen de formar parte de una operación para acabar con la vida de la vicepresidenta chavista Delcy Rodríguez y hasta el momento su paradero sigue siendo desconocido.
Desde entonces, el Gobierno pide a los ciudadanos argentinos que no viajen al país caribeño, con quien la Argentina no tiene relaciones diplomáticas desde que el gobierno de Javier Milei decidió no reconocer la reelección fraudulenta de Maduro el año pasado.