Purga de funcionarios: todos los despedidos por Javier Milei en su primer año de gestión
Desde "motivos personales" o "fuertes diferencias personales", hasta "mal desempeño en sus tareas", uno por uno todos los funcionarios que echó el Gobierno en 365 días de mandato.
A un año de su llegada a la Casa Rosada, Javier Milei se ocupó de transmitir el mensaje de que quien no acompañe las políticas del Gobierno, estará obligado a dar un paso al costado desde su cargo en el Estado. Así se lo hizo saber a más de 30 funcionarios, que por distintas razones fueron echados. Desde cargos de primera línea dentro de su gabinete, hasta puestos en subsecretarías, MDZ recopiló todos los trabajadores del Gobierno que el presidente desvinculó.
Florencia Misrahi fue la última funcionaria en ver la puerta de salida de su cargo. Quien estaba al mando de ARCA (ex AFIP), fue echada el pasado sábado. Según trascendió, Misrahi no aceptó un ajuste considerable en el sueldo que percibía, que pasaba de 32 millones de pesos a alrededor de cuatro.
En lugar de la ahora ex funcionaria nacional asumirá Juan Pazo, quien hace una semana dejó el Ministerio de Economía para convertirse en secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería.
Luego de un mes y unos días de gobierno, el 26 de enero, Javier Milei decidió despedir al reciente fallecido exministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro. Con esta desvinculación, Ferraro se convertiría en el primer titular de cartera que dejaría la gestión libertaria. La versión oficial que dieron desde el gobierno fue que el extitular de la cartera había filtrado información confidencial a la prensa. El exministro pasó 47 días en el puesto.
"Yo no filtré nada a la prensa y tampoco recuerdo que se haya dicho la frase 'los voy a dejar sin un peso' en la reunión de Gabinete", había justificado el exministro en su momento. Junto a la expulsión de Ferraro del Gabinete, el Ministerio de Infraestructura cerró sus puertas y fue absorbido por el Ministerio de Economía.
Otra de las salidas que hizo mucho ruido el último tiempo fue la de Diana Mondino. El cuerpo diplomático había votado en ONU en contra del embargo de Estados Unidos a Cuba. La excanciller tenía los días contados en su cargo y esto fue la gota que rebalsó el vaso. Luego de 326 días en su puesto, el 31 de octubre Mondino fue removida.
A Mondino la reemplazó el exembajador en Estados Unidos Gerardo Werthein. Mediante un duro comunicado, el Gobierno señaló que se iniciaría "una auditoría del personal de carrera de la Cancillería, con el objetivo de identificar impulsores de agendas enemigas de la libertad”.
Otro de los miembros del equipo presidencial que veía su final fue quien ocupó el cargo de Jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Estuvo apenas 169 días en su puesto. La decisión de echarlo estuvo motivada por "la diferencia de criterios y expectativas en la marcha del Gobierno y las tareas encomendadas". Al exfuncionario lo reemplazó Guillermo Francos.
De esta forma, Posse se convirtió en el segundo jefe de Gabinete más fugaz de la historia argentina. Jorge Capitanich tuvo un período más corto de tiempo en este cargo: el chaqueño duró 121 días en el cargo; apenas cuatro meses.
Otra salida de este calibre fue la de quien manejó el Ministerio de Salud, Mario Russo. En una primera versión de los hechos se especuló que fue el Gobierno quien habría echado al titular de la cartera, pidiéndole la renuncia, pero desde Casa Rosada aseguraron que fue él quien, por "temas personales", tomó la decisión de dar un paso al costado del Poder Ejecutivo. El 27 Russo fue echado, tras haber estado 292 ejerciendo su cargo.
El Ministerio de Salud estuvo siempre atravesado por la sombra de Mario Lugones, del Sanatorio Güemes, y su hijo, Rodrigo, cercano a Santiago Caputo. Desde el inicio de la gestión hubo tironeos internos para tener el verdadero control de la cartera. Finalmente, Russo fue reemplazado por Lugones padre.
Salidas de alto rango
En febrero Javier Milei se encontraba de gira por Roma, pero eso no evitó que le mandara un telegrama a dos funcionarios con cargos importantes. Uno de ellos es Osvaldo Giordano, quien supo estar al frente de ANSES por poco tiempo. Flavia Royón, exsecretaria de Minería, también cayó.
La justificación de la desvinculación fue la misma para ambos. Desde la Rosada consideraron que no estuvieron "comprometidos con la modernización, simplificación y desburocratización del estado".
Belén Stettler y Eduardo Roust, secretaria y subsecretario de Medios, renunciaron a sus cargos a poquitos días de haber asumido. Juan Caruso, quien todavía no tenía cargo dentro del equipo, renunció días después.
Marcelo Papandrea tampoco duró mucho en su cargo. Se desempeñó por dos meses como presidente de AySA. Como de costumbre, desde la casa de gobierno justificaron la salida como "motivos personales". En su reemplazo quedó Alejo Maxit.
"Lo he despedido por un error que no debió haber sucedido. Lo están notificando en este momento", dijo el presidente en una entrevista en televisión acerca de la desvinculación del exsecretario de Trabajo, Omar Yasín. La razón del por qué se lo echó nunca estuvo del todo clara. Originalmente Milei había dicho Yasín aumentó los sueldos del personal jerárquico del Estado, aunque la secretaría no toma la decisión de los aumentos salariales en el Estado, sino que solo aprueba la resolución. El abogado Julio Gabriel Cordero quedó a cargo de la Secretaría.
En medio de la polémica por la entrega de alimentos del Ministerio de Capital Humano, la titular de la cartera, Sandra Pettovello, tomó la decisión de desvincular al funcionario encargado de la distribución de comida a comedores y organizaciones sociales, Pablo De La Torre.
El secretario de Niñez y Familia y número dos del ministerio, fue echado luego de reclamos y protestas por la retención de la comida y su vencimiento. Desde el Ministerio justificaron un "mal desempeño de sus tareas" por parte de De La Torre.
Eduardo Rodríguez Chirillo, ex secretario de Energía; Francisco Sánchez, exsecretario de Culto en el Ministerio de Relaciones Exteriores; Fernando Vilella, exsecretario de Bioeconomía; Joaquín Cottani, exsecretario de Política Económica; y Alejandro Cosentino, exsecretario de Innovación, Ciencia y Tecnología, son otros de los secretarios desvinculados durante el gobierno de Javier Milei.
Otras desvinculaciones
El Ministerio de Capital Humano es la cartera que más desvinculaciones colecta. Entre ellas: Héctor Calvente, exsubsecretario de Políticas Sociales; Lucía Raskovsky, exsubsecretaria de Políticas Territoriales y Desarrollo Humano; Ana Marmora, exsubsecretaria de Políticas Familiares de la Secretaría de Niñez; Fernando Szereszevky, Unidad de Gabinete de Asesores; Mariana Hortal Sueldo, exsubsecretaria de Relaciones del Trabajo; Horacio Pitrau, exsubsecretario de Trabajo; Maximiliano Keczeli, exsecretario de Coordinación de Legales y Administrativa; y Gonzalo Fortín, exsubsecretario de Gestión Administrativa.
Las últimas dos salidas que tuvo el ministerio fueron de las que más ruido hicieron. Por un lado, Leila Gianni, quien se desempeñó como subsecretaria Legal del ministerio, fue removida porque “no es compatible hacer política y ser funcionarios”, se justificó. Gianni comenzó a mover sus fichas en La Matanza. Constanza Cassino, exsubsecretaria de Niñez y Familia, fue echada tras adquirir una cafetera por dos millones de pesos.
Desde el Ministerio de Economía, a parte de los ya mencionados, también fueron echados: Héctor Falzone, exsubsecretario de Energía Eléctrica; Adriana Serkis, expresidenta de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA); Juan Manuel Troncoso, ex titular del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE). Los otros ministerios también sufrieron bajas importantes.
A parte de todos los funcionarios echados, mediante el informe de gestión que entregó el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, confirmó que el Gobierno desvinculó a un total 31.226 empleados públicos desde que comenzó su gestión. Del total, 20.026 personas corresponden a la Administración Pública centralizada y descentralizada como AFIP, mientras que el restante (11.200) son de empresas y sociedades del Estado tales como Aerolíneas Argentinas.